Una unión letal para el resto de rivales. Ambos pusieron asfalto por medio, lograron un buen puñado de segundos y se entendieron como grandes amigos. La etapa para Rodríguez, quien alzó los brazos por segunda vez en la Itzulia, feliz con el triunfo parcial y el segundo puesto de la general. Ayuso no disputó la victoria, paso en alfombra roja a Rodríguez. Ambos marcaron en meta un tiempo de 3:37:14, a una media de 39,2 kilómetros/hora. Los perseguidores se entregaron ante la exhibición de la pareja española. Marc Soler completó el festival con la tercera plaza, entrando por delante del batido Mattias Skjelmose, incapaz de seguir a Ayuso en el momento clave de la fuga.
Ayuso subió a la cúspide el podio, degustando su séptima victoria profesional, la tercera de la temporada. Su estreno en World Tour en una prueba de prestigio, a pesar de las circunstancias que elimnaron a las grandes favoritos. Las caídas marcaron la presente edición. Gran segundo puesto para Rodríguez, de 23 años, con 5 victorias en su palmarés, la segunda en la Itzulia, ya que en 2022 dejó su sello en Mallabia. Y la tercera plaza, con sabor agridulce para Skjelmose, solo 1 segundo detrás del ciclista de Almuñecar.
NUMEROSA ESCAPADA, 22 HOMBRES EN LA EXPEDICIÓN
Era la etapa reina, de apenas 138 kilómetros, corta y explosiva, con 7 puertos, sin respiro, y 3.400 metros de desnivel. Todo por decidir con 20 corredores en la general en 1 minuto. De inicio más emoción imposible. «La carrera va a explotar», anunciaba Juan Ayuso, uno de los claros candidatos a la txapela de campeón. De entrada se formó una escapada de 22 hombres, el mejor el colombiano Brandon Rivera a 1.21 minutos. La numerosa expedición superó con ventaja en torno a los 3 minutos los altos de Elkorrieta (3a), Azurki (1a) y Gorla (2a).
En Krabelin (1a, 6 kilómetros al 9,5) se redujo la fuga a 7 hombres, con Kuus, Kruijswijk, Chaves, Mollema, Igor Arrieta. En la persecución Soler atacó abriendo el camino para la estrategia del UAE. El catalán logró enlazar con la cabeza de carrera, junto a Arrieta. Dos hombres de Ayuso en vanguardia.
El movimiento alertó al Lidl del líder Skjelmose, equipo que tomó la responsabilidad de mantener "al baño maría" la escapada, en torno a 1 minuto a 35 km de meta, al paso por Eibar, con las subidas a Izua y Urkaregi por escalar.
AYUSO ATACA EN IZUA Y URKAREGI
La subida a Izua (1a, 4,1 kilómetros al 9) desató las hostilidades, tanto en la fuga como en el grupo de la general. Delante atacó el británico Oscar Onley (DSM), y desde atrás Ayuso lanzó su intentona tras los amagos de Skjelmose y Carlos Rodríguez. El de Jávea asió el bastón de mando, se despegó del líder, atrapó a Soler y Chaves y asumió que debía ser él quien cargara con el protagonismo hasta meta. No iba a ser fácil consolidar la intención, pues Skjelmose y Rodríguez se unieron en la bajada.
AYUSO Y RODRÍGUEZ, SOCIEDAD ILIMITADA
Solo restaba un puerto, el Urkaregi (3a, 5 km à 4.6). De nuevo al asalto Ayuso, quemando las naves por el sueño de la "txapela" de campeón. El alicantino atacó con fuerza, Rodríguez se pegó a rueda. El presente y futuro del ciclismo español en comandita. Puro potencial al comando de la Itzulia. En la cumbre del puerto la sociedad Ayuso-Rodríguez coronó con 32 segundos sobre Skjelmose, quien ya se iba despidiendo de la Itzulia. Con 12 km para meta los españoles juntaron fuerzas para no perder el botín. Por lógica, la etapa para el andaluz y la general para el alicantino.
Dicho y hecho. Ayuso y Rodríguez bajaron el puerto juntos, apretaron juntos llegando a Eibar y hablaron poco, pero claro. «La etapa para mí, la general para tí». Y así fue el paseo triunfal hasta la meta, donde se concretó el bautizo de Ayuso en el World Tour. Desde 2019 no ganaba un español en una prueba del World Tour. El último fue Enrica Mas en el Tour de Guangxi. Ayuso sucede en el palmarés al danés Jonas Vingegaard, ganador en 2023.
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