El exjugador de baloncesto Pau Gasol (c) junto al presidente de Iberia, Marco Sansavini (4i), durante el evento de Iberia 'Talento a bordo' en el que han participado deportistas olímpicos como Marcus Cooper (2i), Ray Zapata (d), Niko Shera (2d), Gerard Descarrega (3i), Silvia Mas (4i), Adriana Cerezo (3d) y Rodrigo Conde (4d), este miércoles, en Madrid. | J. J. Guillén

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El palista Marcus Cooper Walz, campeón olímpico en Río 2016 y subcampeón en Tokio 2020, declaró que no sabe si será capaz de valorar algo tan grande como «portar la bandera más bonita del mundo» al ser el máximo candidato a ser el abanderado de España en los Juegos Olímpicos de París 2024.

«No sé si seré capaz de valorar algo tan grande como portar la bandera más bonita del mundo y del país que he representado desde que me inicié en el piragüismo. Tiene una gran responsabilidad que es estar rodeado de los mejores deportistas que comparten esos valores, que van a darlo todo y que tienen esa adrenalina al ir al evento más grande del mundo», dijo Cooper, este miércoles, en el acto del Equipo Iberia Talento a Bordo, al que acudieron otros deportistas como el judoka Niko Shera, el gimnasta Ray Zapata o la taekwondista Adriana Cerezo, entre otros.

El deportista de 29 años se mostró muy animado en esta recta final de cara a la cita olímpica, donde tanto él como sus compañeros están «cerrando el embudo» para ultimar detalles de acople y de técnica porque cree que «tienen un pequeño margen de mejora» y subrayó que en el K4 el rival a batir es Alemania, aunque ha habido un «incremento de nivel en el resto de los países.»

Sobre competir en dos modalidades (K2 y K4, ambas en 500 metros) por primera vez en su carrera, Cooper señaló que quería superarse: «Va a ser la primera vez que compita en dos modalidades, que es la manera que quiero para superarme, y el objetivo es dar lo mejor de mí, poder ser competitivo en ambas modalidades», explicó el palista, que reconoció que no se pone «objetivos cuantitativos», pero que es posible que pueda volver a casa «con dos alegrías».

Por otro lado, Ray Zapata, gimnasta que consiguió la medalla de plata en suelo en los Juegos Olímpicos de Tokio, confesó que «el gusanillo siempre está» y es "más fuerte" a falta de una semana para competir y afirmó que esta cita olímpica la vive con más tranquilidad al tener ya una medalla en casa.

«Somos el primer deporte que compite y yo creo que va a salir bien. Tengo la tranquilidad de tener una medalla y ahora es un reto personal porque quiero mejorar el resultado. Voy a por ello, creo que puedo conseguirlo», comentó Zapata, que señaló que «está contento y con mucha ilusión»

Los de la capital francesa serán los terceros Juegos Olímpicos de Ray Zapata, que en los primeros no pudo clasificarse para la final en su especialidad, el suelo, y tuvo que conformarse con el undécimo lugar; y que en Tokio obtuvo la medalla de plata en la prueba de suelo, con una nota de 14.933, la misma que Artiom Dolgopiat, pero que, debido a que la dificultad de su ejercicio, fue una décima menor que la del israelí -que capturó el oro-, y, por tanto, se clasificó en segundo lugar.