Aduriz, entre dos tierras

Aritz Aduriz está viviendo una situación cuando menos incómoda. Su nombre se sitúa justo en el centro de una batalla entre su actual club, el Real Mallorca y su anterior equipo, el Athletic Club. El conjunto vasco ha trasladado a la Federación Española el impago de uno de los pagarés por el fichaje del punta y ha solicitado la no presencia del club balear en Europa la próxima temporada si esta deuda no se resuelve. La semana pasada Mateu Alemany señaló que si el club rojiblanco abre una guerra «habrá guerra» y el presidente Tomeu Vidal siguió el martes el camino trazado por su consejero delegado para echar más leña al fuego y calificó el comportamiento del club vizcaíno como «grosero» además de calificar de «maleducado» el comportamiento de Fernado García Macua, el presidente del Athletic. Y en mitad de este frente, situado entre dos tierras, se encuentra Aduriz que es un espectador en una guerra cuyo final es incierto, pero que no hace más que alimentar una polémica que puede tener su cúspide en el partido que ambos equipos jugarán en San Mamés en la jornada 35 del campeonato. De todos los que hasta ahora han hablado el que exhibió un discurso más razonable y meditado fue el jugador que compareció ayer en rueda de prensa para referirse a su situación y del conflicto que se ha creado. «Ojalá podamos ir a San Mamés a jugarnos muchas cosas y el presidente sabrá lo que hace, no voy a entrar a valorar si me parece bien o no, cada uno es mayorcito ya para saber las opiniones que tenemos que dar en público. Supongo que será consciente de lo que dice», comentó el jugador del Mallorca.
A todo esto el futbolista asiste con incertidumbre y con cierta preocupación a lo que ocurre entre clubes pero como bien apuntó Aritz, «poco puedo hacer yo», comentó. «Es una pena que ocurra esto pero estoy confiado y deseo que todo se solucione y que ambos clubes se pongan de acuerdo», comentó el futbolista. «A mí no me influye este tema, soy consciente de que no tengo nada que ver en todo esto, es un acuerdo al que se llego por mí, pero no tengo nada que hacer en este tema», insistió el jugador.
Al margen de la situación institucional, el Mallorca sigue luchando para consolidarse en los puestos europeos de la tabla y no conseguir Europa sería una «decepción», pero no un «fracaso». Así lo explicó el jugador vasco. «Hemos estado en Europa desde que ha empezado la Liga hasta ahora y vamos a hacer todo lo posible para seguir arriba, pero de ahí a que sea un fracaso no poder clasificarnos no sé si se puede llamar así, sería una pequeña decepción, está claro», comentó el punta del Mallorca.
Aduriz tiene claro que a partir de ahora ya no hay tregua y los clubes que luchan bien por Europa o por eludir el descenso «apretarán todavía más». «Eso dice mucho de esta Liga, que es muy dura y todo el mundo aprieta y más de aquí a final de temporada, sobre todo cuando hay que enfrentarse a equipos en apuros. Va a ser un final de Liga que vamos a tener que hacer muchos puntos para estar ahí», comentó. «Los resultados hasta ahora han sido buenos y debemos seguir manteniendo una plaza de privilegio y hay que conservarla ante un rival como el Almería que lo está haciendo bien, sabemos que el domingo nos lo pondrá difícil y hay que intentar puntuar por todos los medios», comentó el futbolista.