El Mallorca renueva a Aouate dos temporadas más, hasta 2015

Firmado en diciembre de 2008 durante el breve mandato de Joaquín García -el presidente puente entre la marcha de Vicenç Grande y la llegada de Mateu Alemany- es uno de los futbolistas con más peso específico del vestuario y de los jugadores más idolatrados por la hinchada. Un líder que se mantendrá en el proyecto durante dos años más y que, posiblemente, acabe su carrera deportiva en la Isla.

Los números avalan la trayectoria de Dudú, que ha demostrado su categoría desde el primer día. A base de regularidad y partidos, su nombre ya forma parte de la galería de leyendas de la entidad. A la altura de otros porteros míticos como Zaki Badou o Carlos Roa. Ya es el segundo guardameta con más partidos en Primera en la historia de la entidad con 137 y, si no sucede nada extraño, esta misma campaña superará a Leo Franco (148) como el meta más prolífico del Real Mallorca.

Con ofertas sobre la mesa del fútbol inglés -la Premier siempre se ha interesado por él-, Aouate ha optado por aceptar la propuesta presentada por Llorenç Serra Ferrer y firmar la renovación de su contrato hasta 2015. El director deportivo es uno de sus principales valedores. De hecho, una de sus primeras decisiones como accionista mayoritario de la entidad, en julio de 2010, fue ampliar el contrato del meta israelí hasta el 30 de junio de 2013.

Presión
Su cuota de poder dentro del vestuario bermellón es enorme. Junto a Nunes, Martí y Víctor, el meta israelí forma parte del núcleo duro de la caseta. Es de esos futbolistas que imponen respeto. Que manda dentro y fuera del campo.

En diciembre de 2008, después de un lustro desfilando por el fútbol español -en Santander y La Coruña-, el destino le unió a la Isla. Era diciembre de 2008. Con el club balear en plena convulsión institucional tras la marcha de Vicenç Grande y con el equipo deambulando por las cloacas de la clasificación -era colista-, su nombre apareció sobre la mesa. La lesión de Miquel Angel Moyà y la desconfianza que transmitía Germán Lux obligaron al club a buscar a un portero con garantías. Y confiaron en Aouate, que tenía las puertas de salida abiertas de par en par tras un incidente con Gustavo Munúa.

Joaquín García, el presidente puente entre el propietario de Drac y Mateo Alemany, apenas tuvo tiempo para nada, salvo para cerrar su contratación, zanjado unos días antes de que la LFP prohibiera al club balear realizar fichajes por la deuda con el Athletic por Aduriz...

El 11 de enero de 2009, en Son Moix ante el Real Madrid, se estrenó con la camiseta bermellona con un resultado nada esperanzador (0-3). A la semana siguiente, otra derrota en Villarreal (2-0) que cerraba una primera vuelta sonrojante con apenas 14 puntos.

El Mallorca abrió la segunda vuelta con un convincente triunfo ante el Valencia que alteró el destino. Desde entonces, Dudú Aouate se ha convertido en un pilar fundamental, en un eslabón imprescindible que defenderá la meta bermellona durante dos temporadas más. Ya está entre los veinte jugadores con más partidos en la historia del Mallorca en Primera y, si cumple con su nuevo contrato, se situará en el podio histórico de la entidad, rebasando los 200 encuentros de Liga.

Antes de iniciar su aventura en la Liga, donde ya acumula 318 encuentros, militó en las filas del Hapoel Haifa FC durante tres años y en la temporada 2001/02 se fue al eterno rival, el Maccabi Haifa FC, un cambio que armó un importante revuelo en su país, donde es un auténtico ídolo. De hecho, Aouate también es el líder de su selección, a la que considera como su otro equipo. Con el Hapoel y el Maccabi Haifa conquistó la Liga.

En el verano de 2006, después de buenas campañas en Santander y tras una operación rocambolesca que incluyó el traspaso de Munitis, las cesiones de Momo y Rubén y un millón de euros, Aouate se marchó al Deportivo. El interés de Joaquín Caparrós por el internacional israelí para cubrir la marcha de Molina, provocó ese cambio de cromos, que también incluyó a Antonio Tomás y a un chaval de 14 años llamado Sergio Canales.

Ahora, cuatro años después de su llegada, Aouate extenderá su leyenda hasta 2015.