Dudú Aouate, con las manos en la cabeza. | Carlos Mira

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Corría el minuto 60 cuando Dudú Aouate saltaba para blocar un balón, Nunes se le cayó encima de la rodilla y saltaron las alarmas. El meta israelí se lamentaba en el terreno de juego. Intentó aguantar, pero al minuto se dio cuenta que no podía continuar. Que la rodilla no aguantaba lo suficiente. Entonces, Rubén Miño pisó el césped y firmó su estreno.

A la espera de unas exploraciones definitivas, la lesión de Aouate no pinta nada bien. Más por las sensaciones que desprendía el propio meta israelí. En principio, sufre un esguince en el ligamento lateral de su rodilla que le podría mantener varios partidos alejado de los terrenos de juego.

No obstante, hasta previsiblemente la jornada de hoy no se conocerá al alcance exacto de la lesión que sufre Dudú Aouate justo en el tramo definitivo de la temporada, con la segunda vuelta recién iniciada.

Ahora, si se confirma la baja del israelí, tanto Calatayud como Miño se jugarán la plaza de portero titular, una demarcación que resulta fundamental en un equipo y esencialmente clave en un equipo que se está jugando sus opciones de salvación en la máxima categoría del fútbol español.