El serbio Jovan Stankovic posa con la silla que lleva su nombre en el Mallorcafé. | R.D

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A más de 2.200 kilómetros de Palma, concretamente en Belgrado, se encuentra Jovan Stankovic, uno de los grandes jugadores de la historia reciente del Real Mallorca. Su golpeo con la zurda, así como sus zancadas por banda, todavía tienen hueco en la memoria del aficionado mallorquinista a pesar de que hace catorce años que abandonó la entidad bermellona. Ahora, en su país natal y con el título de entrenador bajo el brazo, sueña con volver a trabajar en el club que le dio la oportunidad de triunfar en España. Así lo expresó este martes en Ultima Hora Esports.

—¿Qué está haciendo en la actualidad?
—Ahora mismo no entreno. El año pasado estuve dirigiendo al segundo equipo del Estrella Roja y me fue muy bien pero recibí una oferta de un equipo de la máxima categoría de Montengro y las cosas acabaron mal. Allí solo estuve seis meses por problemas de impagos. Y desde entonces, hace tres meses, llevo parado en busca de un nuevo reto que me atraiga.

—¿Ha tenido ofertas para entrenar en España?
—He estado siete años entrenando en Serbia sin interrupción. Es muy difícil el mundo de los entrenadores pero me gusta mucho dirigir y voy a intentar de todas las maneras hacer una buena carrera en los banquillos, tal y como hice de futbolista. En España todos sabemos que hay mucha competencia y el nivel es muy alto. Ahora estoy buscando equipo y a ver de qué parte del mundo me llega la oferta.

—¿Le gustaría trabajar en el Mallorca?
—Por supuesto que sí. Hace trece años que me marché del club y nunca se me ha presentado la posibilidad de volver. La realidad es que regresar no depende de mí pero me gustaría mucho trabajar con los chicos de la cantera. Tengo piso en Palma y si se diera la oportunidad de irme para allá no dudaría en regresar a Mallorca.

—¿Conoce a los gestores actuales del club bermellón?
—Coincidí con el Consejero Delegado, Maheta Molango, en una ocasión durante una visita a Palma que hice. Estuvimos hablando de muchas cosas pero no del tema de volver. Hay que tener en cuenta que en aquel momento yo estaba entrenando en Estrella Roja.

—¿Sigue al Mallorca?
—Claro que lo sigo. No puedo ver los partidos en directo pero luego por Internet y por Facebook veo los goles. El Mallorca no merece estar en Segunda B. Con la ciudad, la afición y las instalaciones que tiene el club, se merece como mínimo estar en Segunda luchando por volver a Primera. Los mallorquines están sufriendo con el equipo, como lo hago yo también, pero creo que el equipo al final acabará subiendo.

—Poca gente de tu época en el Mallorca continúa trabajando en el club.
—Sí, estoy al tanto de lo que ha ocurrido. Es una pena que gente como César Mota y José León, que llevaban tantos años en el Mallorca, ya no estén. Su salida como la de otros es decisión de los nuevos gestores y yo no me puedo meter en ello. Lo cierto es que hace mucho tiempo que me fui y es normal que haya habido cambios en el club.

—¿Recuerda cómo fue el año del ascenso de Vallecas?
—Fue un temporada rara. Empezamos muy bien el año, ganándolo todo pero cuando se acercaba el final, cuando llegaba lo importante, perdimos muchos puntos, sobre todo en casa. Eso provocó que destituyeran a Víctor Muñoz y llegó Tomeu Llompart. A pesar de todo esto acabamos subiendo a Primera.

—Es que ahora el Mallorca lleva tres puntos de los últimos quince...
—El equipo ahora ha bajado el rendimiento, pero es que es muy difícil estar todo el año al nivel con el que se inició la temporada. Yo sigo pensando que el Mallorca, a pesar de esta mala racha, va a acabar primero en liga y que va a subir en el playoff.

—Por redes sociales vemos que tiene un nieto.
—Sí, tiene dos años y la verdad es que ya le pega al balón. Ahora que estoy sin equipo paso mucho tiempo con él e intento enseñarle cosas. Tiene ya dos camisetas del Mallorca, una roja y la otra blanca, y la verdad es que le gusta el fútbol pero yo no soy de esos abuelos que van a obligarle a jugar si él no quiere.

—¿Qué mensaje le mandaría a los mallorquinistas?
—Les diría que siempre, sea quien sea quien mandé en el club, apoyen al Mallorca. Están en una isla maravillosa y sufren mucho con su equipo pero tienen que aguantar. Palma es una gran ciudad y los mallorquinistas se merecen tener a su equipo en Primera División y que vuelva a ser uno de los grandes clubes de España.