«No es ningún examen», recuerda Luis García. «Es un partido muy parecido al de la semana pasada. Pero esto va a ser una lucha constante hasta el final pase lo que pase el domingo. Por otro lado, nunca he descartado ni al Rayo Vallecano ni al Sporting y ya dije que ninguno de los tres de arriba haríamos tantos puntos como en la primera vuelta. Este es un partido más, con un rival importante, eso sí, pero tres puntos como los de Albacete o Logroño», matiza.
«No tenemos miedo», añade a su vez el entrenador madrileño, que ve muy bien a sus futbolistas. «Tengo presión desde el primer día, la tenemos todos, y estamos bien. Llevamos 51 puntos y vamos a seguir en la lucha total, pase lo que pase. Porque aunque gane el Almería se nos iría a un punto faltando 16 jornadas. Así que no es una final. Ojalá ganemos y nos vayamos a cinco, pero queda un mundo. Es un encuentro bonito entre dos equipos con un gran potencial. Hay muy pocas diferencias y cuando eso pasa los detalles influyen mucho. En nuestro caso, el grupo es muy fuerte anímicamente y estamos preparados».
En esa dirección, LGP recuerda que el abrupto inicio de la segunda vuelta que ha tenido el Mallorca tampoco ha sido precisamente malo. «Llevamos cinco partidos en los que hemos jugado ante Rayo, Girona, Espanyol y Almería. Hemos tenido un calendario muy exigente para arrancar y hemos hecho nueve puntos que pueden ser diez o doce. Es una buena cosecha. El equipo está bien y las sensaciones que transmite son buenas».
Atendiendo solo al balón, cree Luis García que el Mallorca-Almería será un choque frontal entre «dos equipos muy parecidos» que basan su propuesta en el juego combinativo. «Sacan el balón desde atrás siempre que pueden, como nosotros, y a veces arriesgando. Después es verdad que hay ciertas diferencias. Ellos son más físicos y nosotros tenemos más movilidad e intercambio de posiciones», aclara.
«Debemos saber que nos van a hacer correr mucho cuando no tengamos la pelota y que cuando la tengamos nosotros, nos tiene que durar. El que pueda imponer su estilo va a tener más opciones de victoria», apunta.
Desde el pico más alto de la clasificación, Luis García reconoce que la fuga que tiene el Mallorca en Son Moix es de origen desconocido, pero insiste en que los números del grupo fuera de su estadio tampoco son habituales. «Le ha dado muchas vueltas a por qué perdemos puntos en casa. La temporada aquí no es mala, yo diría que es buena, al tiempo que es excepcional lo que estamos haciendo como visitantes», argumenta.
«Somos el líder de la categoría, y por primera vez lo sentimos así. Pase lo que pase el domingo esto va a ser muy largo. Cada jornada es una historia y en nuestra cabeza solo hay una cosa: ganar. Y para ascender directo vamos a tener que hacer una temporada increíble», repite una y otra vez en voz alta.
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