El entrenador del Real Mallorca, Luis García Plaza, da órdenes a sus jugadores durante un reciente entrenamiento en la Ciudad Deportiva Antonio Asensio. | Teresa Ayuga

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La plantilla del Mallorca vuelve a la carga. Nueve días después de su última función en Granada y a solo cuatro de abrirle las puertas de su salón al Barcelona de Xavi Hernández, los de Luis García Plaza regresan este martes al tajo con una doble sesión de entrenamiento en su laboratorio de Son Bibiloni -la matinal a partir de las 10.30 horas; la vespertina a las 17.00- para preparar la visita del conjunto azulgrana, que a su vez servirá para echarle el pestillo a una primera vuelta en la que el equipo ha llenado, con 20 puntos, la mitad del saco de la permanencia. En total, al grupo le esperan cinco jornadas de trabajo que estarán marcadas por los primeros movimientos del mercado y por el endurecimiento del procotolo sanitario que ha recuperado LaLiga para protegerse frente a la actual oleada de COVID. La plantilla y el cuerpo técnico al completo se sometían este lunes a las pruebas PCR para descartar posibles casos antes de ceñirse otra vez el mono de faena. Y a la espera de los resultados, la preocupación dentro del club es notable porque la mayoría de equipos están registrando altos índices de contagio al regreso de las vacaciones navideñas.

El conjunto balear se sumerge en la segunda mitad de la temporada con las espaldas cubiertas y un tortuoso camino por delante hasta llegar a la línea de meta. El partido del Nuevo Los Cármenes dejó un poso amargo, pero al equipo le siguen saliendo las cuentas. Ha reunido 20 puntos en 18 jornadas y la brecha que le separa de los puestos de descenso es de cinco -la puerta al infierno la marca el Deportivo Alavés, con 15-, aunque con más de la mitad de la travesía por completar y un montón de curvas por recorrer, no hay un solo motivo para relajar la guardia.

El partido contra el Barça (Son Moix, domingo 2 de enero, 21.00 horas) marcará el nuevo punto de partida para el Mallorca y el inicio de la tradicional cuesta de enero, que en 2022 se presenta particularmente empinada. El conjunto balear finalmente podría contar con Iddrisu Baba para recibir a la escuadra de Xavi Hernández, que viajará a Palma sin Busquets y Gavi (sancionados), ni Lenglet que ha dado positivo en COVID. Tampoco dispondrá de sus nuevas incorporaciones, ya que ni Dani Alves ni Ferran Torres tendrán tiempo de ser inscritos ante LaLiga al abrirse el plazo el día 3.