Muriqi y Abdón Prats celebran el primer gol del Mallorca contra el Alavés. | RCDM

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Entre dimonis y piratas, Javier Aguirre ha terminado encontrando petróleo. El entrenador mexicano, que ya suma casi un mes de reparaciones dentro del vestuario del Mallorca, va dando con las piezas que mejor encajan en su molde y ha localizado, cuatro partidos después, un modelo productivo en ataque al juntar en unas pocas baldosas a Vedat Muriqi y Abdón Prats. Cada uno a su estilo, cada uno en su papel, entre el artanenc y el kosovar dejaron malherido al Alavés con dos goles antes del descanso y mantuvieron al equipo agarrado a la cuerda de la permanencia abriendo una vía que no había sido explorada.

Hasta el pasado martes, Muriqi y Abdón solo habían coincidido sobre el terreno de juego de forma muy puntual y nunca de inicio en la misma alineación. Un ratito contra el Valencia, otro frente al Real Madrid y medio tiempo contra el Espanyol en el encuentro que marcaría el final de la era García Plaza. De hecho, el atacante mallorquín ni siquiera había contado para elVasco Aguirre en sus primeras tres funciones contra el Getafe, el Atlético y el Elche, en las que optó por Fer Niño, Kang In Lee y Amath como acompañantes de Muriqi. Ninguna de las tres fórmulas resultó efectiva y en 270 minutos de juego el Mallorca solo alcanzó el centro de la diana desde el punto de penalti. Hacía falta algo más.

Aguirre continuó agitando la coctelera y contra el Alavés, en un partido marcado en negrita y sin escapatorias, dio con una pócima más productiva. Modificó la línea defensiva, volvió a un 4-4-2 clásico y alineó de inicio a Abdón Prats, que llevaba tres meses alejado del once para situarlo por primera vez desde el calentamiento al costado de Muriqi. Los dos se entendieron y complementaron. El balear despejó el camino celebrando el que era su primer tanto en Primera en el estadio de Son Moix y el de Prizren encarrilaba el partido antes del descanso con una diana de autor. Dos de los tipos más carismáticos de la plantilla y dos de los más queridos por la afición se aliaban para encender las gradas y volver a ilusionarla con la salvación.

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FIchaje de lujo

En el caso de Muriqi, le ha bastado con una docena de encuentros para dejar huella y desmarcarse como el mejor delantero de un plantel que en los primeros pasos del proyecto ya había incorporado para su misma posición a Ángel Rodríguez, Matthew Hoppe y Fer Niño. El internacional por Kosovo, especialmente impactante en sus primeros partidos como bermellón, ha recuperado ese mismo nivel en las últimas jornadas y será imprescindible en el trayecto hacia la tierra prometida. De momento, con los cuatro goles que acumula ya ha igualado a Salva Sevilla como el máximo artillero de la plantilla y ha reducido a cenizas los números que dejó en Italia con la camiseta del Lazio.

El rendimiento de Vedat Muriqi no solo sobresale entre los muros de Son Moix, sino que le avala como una de las mejores incorporaciones invernales de la Liga. De todos los futbolistas que recalaron en la Primera División durante el mes de enero, solo hay uno que haya tenido más puntería y más incidencia en el rendimiento de su equipo: el barcelonista Pierre-Emerick Aubameyang. El delantero gabonés ha marcado ocho goles en el torneo regular desde que viste de azulgrana.

Aunque las opciones de que Vedat Muriqi siga en el Mallorca más allá del 30 de junio son escasas, el debate vuelve a estar sobre la mesa y eso supone una buena señal para todos. Cedido por el Lazio hasta final de campaña, el club romano estableció una opción de compra que ronda los 12 millones de euros y que supone un precio altísimo para las arcas del conjunto insular. En cualquier caso, su futuro parece lejos de Roma pese a que tiene contrato hasta 2025 con el club biancoceleste, que realizó una importante inversión en su momento. El resurgir del Pirata en Mallorca podría llevarle de nuevo de vuelta al fútbol turco, donde el Fenerbahce permanece muy atento a su progresión.

El apunte

Baja sensible en Barcelona

La próxima jornada Vedat Muriqi se perderá su primer partido desde que es futbolista del Mallorca. El internacional kosovar recibió completó contra el Alavés un ciclo de amonestaciones y no podrá jugar en el Camp Nou contra el Barcelona el próximo 1 de mayo (21.00 horas). Su ausencia supondrá toda una prueba para el equipo, que se ha acostumbrado a tenerlo como referencia.