Manu Morlanes durante un partido.

TW
1

El Real Mallorca ni siquiera apurará hasta los últimos instantes del mercado de invierno -se cierra esta medianoche- para entregarle a Javier Aguirre las dos piezas que reclamaba. El lateral sueco Ludwig Augustinsson, cuya cesión sin opción de compra por parte del Sevilla se oficializó ayer, y el centrocampista maño Manu Morlanes, con el que negociaba anoche los últimos flecos de su contrato (cesión con una opción de compra obligatoria al Villarreal en caso de permanencia de entre cuatro y cinco millones de euros) reforzarán al plantel bermellón de cara a la segunda vuelta de la temporada. Augustinsson abre la puerta del vestuario para ocupar la plaza de Braian Cufré y competir por el carril zurdo con Jaume Costa. Morlanes, en cambio, llega con un rol más de titular aunque es cierto que en el presente curso apenas ha entrado en los planes ni de Emery primero ni de Quique Setién actualmente. Apenas ha disputado 158 minutos en el torneo de la regularidad y formaba parte de la segunda unidad, con titularidades en Conference League y la Copa del Rey.

Con la incorporación de Manuel Morlanes Ariño (Zaragoza, 1999) el club se cubre las espaldas de cara a la más que posible salida de Iñigo Ruiz de Galarreta a final de curso rumbo a Bilbao. Es un futbolista dinámico, con una gran visión de juego y con los pases a las espaldas de los centrales como una de sus principales virtudes. Tiene una gran capacidad para conducir el balón y le gusta tener libertad a la hora de desplegar su juego.

Formado en el fútbol aragonés (Miralbueno, Oliver y Real Zaragoza) recaló en el Villarreal en edad juvenil. Con la mayoría de edad recién rebasada, comenzó a asomarse por el primer equipo de la mano de Calleja y como sustituto de Manu Trigueros, otro producto formado en Miralcamp como Moi Gómez, Gerard Moreno o el internacional Pau Torres. Fue clave en aquel filial que estuvo a punto de ascender a Segunda División A. En la siguiente campaña alternó el filial con el primer equipo que dirigieron Calleja y Luis García Plaza. En la temporada 2019-20, con 20 años, ya se instaló como jugador de la primera plantilla.

Almería, ida y vuelta

Al no disponer de la continuidad que deseaba, optó por irse cedido al Almería con opción a compra, pero con opción a recompra de tres años por parte del club castellonense. Fue suficiente un año para que el Villarreal ejecutara dicha cláusula a cambio de 4 millones de euros. Pero después de participar en la Supercopa de Europa ante el Chelsea, volvió a abrir la puerta de salida, en ese caso para recalar en el Espanyol de Vicente Moreno.

Disputó 27 encuentros, once de ellos como titular, y marcó dos goles. Regresó el pasado verano a su casa pero la gran competencia en la sala de máquinas (Capoue, Baena. Parejo, Manu Trigueros, Coquelin...) y sus ganas de jugar han provocado su cesión al Mallorca, cuyos flecos se cerraban anoche con la presencia en Villarreal de Pablo Ortells, director de fútbol de la SAD balear. Llegaría a la Isla en calidad de cedido con una opción de compra obligatoria en caso de ascenso de entre cuatro y cinco millones de euros, según las variables del contrato. Se espera que durante la jornada de hoy se puedan cerrar los últimos detalles para dar oficialidad al tercer fichaje del Mallorca en este mercado invernal.

Horas antes de partir rumbo a Villarreal, Pablo Ortells cerró la cesión hasta final de temporada de Ludwig Augustinsson (Estocolmo, Suecia, 1994). El defensa llegó al Sevilla FC la temporada 2021-2022, traspasado del Werder Bremen de la Bundesliga. En Sevilla disputó un total de 27 encuentros oficiales, 19 de Liga Santander, 3 de Liga de Campeones, 2 de Europa League y 3 de Copa del Rey. Esta temporada estaba cedido en el Aston Villa de la Premier League. Augustinsson es un habitual en las convocatorias de la selección de Suecia. Ha jugado con su país un total de 50 partidos. El futbolista llega para reforzar el lateral izquierdo del equipo.