El centrocampista del Osasuna Lucas Torró disputa un balón con el defensa del Villarreal Johan Mojica durante el último partido del conjunto navarro en El Sadar. | Jesus Diges

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Osasuna se ejercitó este martes en Tajonar a tres días de visitar al Real Mallorca, con el incidente de Lucas Torró tras golpearse contra una de las vallas publicitarias durante el partido de fútbol que disputaba el equipo. El centrocampista se marchó por su propio pie y no parece peligrar su presencia en las islas ni en la vuelta de semifinales de la Copa del Rey ante el Athletic la próxima semana. Su figura es clave para que Osasuna tenga opciones ante los leones, por lo que el silencio se hizo en las instalaciones durante unos instantes.

Jagoba Arrasate metió más intensidad a la sesión de este martes. Tras unos ejercicios de activación y técnica, la plantilla realizó acciones ataque-defensa antes de disputar un patido de fútbol a campo parcial. Mañana tendrá lugar una nueva prueba en la que Arrasate podría perfilar su once.

El técnico rojillo no pudo contar en el entrenamiento de este martes con el Chimy Ávila, que continúa con su proceso de recuperación, ni con David García, Ez Abde, Aimar y Manu Sánchez, que siguen participando en las concentraciones internacionales. Por su parte, tanto Unai García como Rubén Peña se ejercitó con el grupo. Cinco jugadores del Promesas trabajaron con los mayores para paliar las ausencias. Los internacionales tan solo contarán con dos días para preparar el duelo ante los bermellones.

El equipo volverá a entrenarse mañana a puerta abierta en Tajonar, a partir de las 10:30 horas. La última sesión previa al encuentro frente al Mallorca se llevará a cabo el jueves a puerta cerrada y a su conclusión Jagoba Arrasate comparecerá ante los medios de comunicación en una rueda de prensa.