El aficionado declaró en el juzgado en abril del año pasado, pidió perdón al jugador y negó connotaciones racistas. | Ultima Hora

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El Real Madrid quiere llevar a juicio al aficionado del Mallorca que llamó «mono» a Vinicius Jr. El club ha pedido al juzgado de Instrucción 3 personase como acusación particular contra el único investigado en la causa, un joven de 20 años que ya reconoció en el juzgado que fue el autor de los insultos racistas.

Por el momento, la titular del juzgado ha dictado un auto en el que rechaza la personación madridista al considerar que el club no es un perjudicado directo por lo sucedido en Son Moix durante el partido del cinco de febrero del año pasado entre el Mallorca y el Madrid. Esta decisión ha sido recurrida por los merengues que han acompañado su alegación con un escrito del propio Vinicius en el que afirma estar representado por la institución y que aún no ha sido resuelto por la magistrada.

La personación del Madrid llega con la causa prácticamente cerrada y cuando, según fuentes de la causa, se había alcanzado un principio de acuerdo entre la Fiscalía, la defensa del acusado y las dos acusaciones hasta ahora presentes: el Mallorca y LaLiga. Ese pacto pasaba por una sanción penal al joven tanto por el episodio relacionado con Vinicius de febrero como por otro similar que se produjo dos semanas después y que tuvo como objeto de los insultos racistas al jugador del Villareal Samu Chukwueze.

El juzgado decidió juntar los dos procedimientos que se seguían contra el mismo aficionado en una única causa tras una petición de LaLiga, lo que ha retrasado meses la tramitación de las actuaciones y han dado lugar a estas diligencias que son las que ya estaban casi finalizadas y que ahora queda pendiente de qué ocurre con el Madrid. El club intentará aumentar la responsabilidad penal en el caso ante la reiteración de insultos al mismo jugador.

El investigado compareció ante la magistrada en el mes de abril de 2023. En su declaración admitió que insultó al jugador pero intentó descargar a sus palabras de tintes racistas. Insistió en que lo que gritó fue moneot y no ‘puto mono' y le atribuyó un significado común como ‘tonto' sin connotaciones xenófobas. Pidió perdón al jugador en ese interrogatorio. Por su parte, Vinicius Jr., que compareció durante la instrucción por videoconferencia testificó se sentía afectado por la situación y ofendido por los gritos racistas que recibe, si bien admitió que no había escuchado ese insulto en concreto durante el partido en Palma.

El joven había sido identificado por la Policía Nacional tras el incidente y, durante la instrucción, la magistrada ha tomado declaración a buena parte del personal de seguridad del Mallorca para acreditar al detalle las circunstancias en las que se produjo el incidente. En paralelo a la investigación penal, el aficionado fue ya expulsado durante tres años del campo por el club y afronta también un expediente administrativo que puede desembocar en una multa económica.