Después de que el domingo pasado, Pablo Carreño escribiese su nombre en letras de oro en el Masters 1.000 de Montreal y se uniese a la larga lista de españoles con un título en esta categoría de torneos, el torneo de Cincinnati arranca con un cartel importante y con muchas cosas que le añaden picante al panorama tenístico. El principal aliciente de esta edición del torneo americano es el posible cambio en lo más alto del ranking ATP. Tanto el balear, como Alcaraz y Tsitsipas pueden derrocar a Danil Medvedev, que espera en la parte alta del ranking. En el caso de Nadal, el primer rival que se cruza en su camino es el croata Bora Coric, que eliminó a Lorenzo Mussetti en la ronda preliminar por un claro 6-2, 7-6. El mallorquín, que empieza por la parte inferior del cuadro por la ausencia de Novak Djokovic, se encontraría con Bautista en octavos y coincide con Alcaraz, Auger Aliassime o Cilic por esta parte del cuadro.
El tenista murciano, Carlos Alcaraz, que ya ha empezado a acusar la presión de los que le compraran con Nadal, buscará redimirse en Cincinnati de su derrota en Montreal. El torneo estadounidense se adapta a sus condiciones tenísticas, dado que el tiempo y las características que tiene la pista son las mismas que el US Open, donde empezó a demostrar su gran tenis ante el mundo.
Rafael Nadal y Alcaraz, tienen ante sí el reto de poder conseguir el número 1 del ranking mundial. Precisamente, cumplirá mañana, se cumplirán 14 años de la primera vez que el manacorí se sentó en el trono de la ATP. Con la consecución del Masters 1.000, Nadal conseguirá colocarse en lo más alto tras dos años y medio (3 de febrero de 2020), en el caso de que Danil Medvedev no llegue a cuartos de final. De hecho, el ruso llega bajo de forma. Tras su dura derrota en Montreal ante Nick Kyrgios en segunda ronda, Medvedev pretende levantarse en una pista donde ya sabe lo que es ganar en 2019. Su primer rival será el neerlandés Botic van de Zandschulp. Si se dan todas estas circunstancias, el tenista mallorquín volverá a encontrarse en una de las situaciones que pensaba imposibles a sus 36 años. «Sería algo muy bonito volver al número uno. Es algo que veía improbable a día de hoy», comentó Nadal en la primera rueda de prensa en el torneo de Cincinatti. Un trofeo que tan solo ha levantado una vez a lo largo de toda su carrera. Fue en 2013 ante John Isner. La única vez que consiguió levantar este trofeo. Tras esa semana de gloria, las tierras de Ohio se volvieron malditas para Nadal, pues después, tan sólo llegó a cuartos de final una vez, donde precisamente fue su rival de esta tarde, que le despachó de manera muy sencilla. Con la derrota ante el balcánico, Nadal se ha ausentado hasta hoy de Cincinatti. En un total cuatro ediciones sin jugar este Masters 1.000, por lo que el mallorquín lo encara con muchas ganas de poder levantar el título, aunque no será tarea fácil. Por otro lado, los españoles Carlos Alcaraz y el Pablo Carreño buscarán poder seguir creciendo. El asturiano quiere prolongar su buena racha tras su victoria en Montreal ante Hurcakz.
El apunte
Jaume Munar se despide ante Cilic
3 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Envidia y avaricia, ¿eso es lo que tenéis hacia Rafa Nadal?.
"La envidia es el homenaje que la mediocridad le rinde al talento". Ahí lo dejo...
La avaricia rompe el saco y como el todavía no lo tiene lleno ....... Vete a tu casa YA