A sus 21 años, el español se convierte en el jugador más joven de la historia en alcanzar finales de Grand Slam en todas las superficies, y buscará sumar su tercer Grand Slam contra el vencedor del duelo entre el alemán Alexander Zverev, cuarto del mundo, y el noruego Casper Ruud, séptimo favorito. «Ha sido un sufrimiento, aquí hay que disfrutar de la grandeza de este torneo, pero hoy, durante cinco sets, hemos tenido que pelear y hay que saber también disfrutar del sufrimiento», dijo el español. Alcaraz, que el año pasado cayó en una dramática semifinal contra el serbio Novak Djokovic, se convierte en el segundo finalista más joven sobre la tierra batida de París, por detrás de su compatriota Rafa Nadal.
Como en su ya legendario choque en el Abierto de Estados Unidos de 2022, en el que Alcaraz levantó una bola de partido antes de apuntarse el choque y, posteriormente, el torneo, lo que le propulsó al número 1 del mundo, los dos contendientes batallaron durante cinco sets.
Considerado el duelo entre los dos mejores exponentes de la generación nacida en el siglo XXI, la presión fue la tónica dominante durante el partido y atenazó a ambos contendientes, que multiplicaron los errores. A falta de calidad, el partido tenía que resolverse por la épica, la constancia y la fe y el español, que estuvo a remolque durante buena parte del partido, tuvo un poco más para aguantar en el tramo final y acabar levantando los brazos.
Con su quinta victoria en nueve duelos contra Sinner, la segunda este año tras la de la semifinal de Indian Wells, Alcaraz frenó la progresión del italiano, que este lunes será el primero en coronar el ránking del tenis y que encadenaba doce triunfos consecutivos en Grand Slam tras haber levantado en Australia el primero del año. Y también aguó el festín del tenis italiano en este Roland Garros, frenó el póker que preparaban y dejó al cuadro individual masculino como el único que no tendrá el fin de semana un finalista transalpino.
Jasmine Paolini jugará este sábado la final contra la polaca Iga Swiatek y el domingo, junto a Sara Errani, la final de dobles, mientras que Simone Bolelli y Andrea Vavassori jugarán la del doble masculino.
Alcaraz comenzó mal, estuvo tenso todo el partido, multiplicó los errores (58) pero supo sobrevivir para llegar con opciones hasta el final, contra un rival que más allá del primer set, tampoco tuvo un tenis fluido, y también firmó numerosos fallos (44).
No era un día para retrasos en un París tomado por las fuerzas de seguridad, con calles cortadas para dejar paso a los presidentes de Estados Unidos, Joe Biden, y Ucrania, Volodímir Zelenski, de regreso de la conmemoración del desembarco de Normandía, pero Alcaraz llegó tarde.
Estaba en la central de París a la hora acordada de su cita con Sinner, la novena de su corta carrera que, a buen seguro, traerá otras, pero aunque hizo acto de presencia, realmente no había llegado aun cunado empezó el peloteo.
Un 4-0 de salida, dos servicios rotos del español, dos juegos en blanco con su saque el italiano y ya el partido hipotecado, cuesta arriba. Veinte minutos tardó el español en ganar su primer juego, 26 el romper el primer saque a su rival, pero cuando parecía que se reenganchaba, el martillo del virtual número 1 volvió a golpear para cerrar la manga.
No encontraba la vuelta al duelo el murciano, obligado a arriesgar para contrarrestar la eficacia de Sinner con su servicio, una apisonadora con una eficacia del 85 %, y así tanto se acierta como se falla. A Sinner, el cándido, se le ponía cara de asesino, apretaba el puño con rabia, cerraba la mandíbula y en sus ojos se dibujaba sangre. No quería dejar escapar la presa.
La segunda manga parecía discurrir por el mismo cauce, 2-0 de entrada y un augurio sin apelación: a ese ritmo no se puede ganar al italiano. Pero el tren de tenis de Sinner fue perdiendo fuerza, su servicio dio algo de oxígeno al español, su derecha empezaba a hacer estragos (14 golpes ganadores) y mandaba bolas más altas, más molestas, a las que el italiano no supo responder (solo dos golpes ganadores). Cinco juegos seguidos se apuntó Alcaraz y la segunda manga de su lado. Otro partido.
El duelo se fue a la deriva. Nerviosos, tocados físicamente, los dos adversarios multiplicaron los errores, que fueron más que los aciertos desde ambas raquetas, dejaron escapar una y otra vez opciones de cobrar ventaja. El fisio atendió al italiano, de la mano derecha y de las piernas, como si quisiera prevenir posibles calambres. El español tampoco rulaba a pleno rendimiento. Sin calidad, el partido se aferró a la emoción.
Alcaraz golpeó primero, rompiendo el servicio en el tercero, pero enseguida cedió el suyo y ya no lo pudo recuperar, pese a que dispuso de hasta cuatro opciones para conseguirlo. El saque del español entró en una fase dramática, mustio, inofensivo, sin picante, un regalo para Sinner que se lo arrebató en el sexto juego y ya no dejó escapar el margen.
Se aferró al cuarto set Alcaraz, el más impreciso de todos, una hoja caída de un árbol que podía ir a cualquier lado. Atenazados por el miedo, arriesgaban poco y fallaban mucho, pero el español amarró el set en un acelerón final, que no fue más que el preludio de la apoteosis final. Carlitos había recuperado el colmillo y en el quinto set zarandeó al italiano, colocándose 4-1 y llevando toda la presión al campo rival. Se aferró a su servicio y, con mucha tensión, cerró el duelo.
11 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Jordi SintesA ti la vida ya te puso en el tuyo. Eres el fotógrafo, no? Pues vete a hacer fotos y que los que ganan partidos de tenis sigan haciéndolo y los que somos capaces de reconocer el mérito ajeno lo disfrutemos. Mediocres!
rupertoTú eres Ruperto tres veces campeón en...Petanca?
rupertoToda la razón. por mucho que quiera, es un mediocre.
Un chulito como una casa. sin mas comentarios de acuerdo totalmente con ruperto y agermanat espero que pierda la final y le den un buen repaso. y lo pongan en su sitio.
Vaya g. de titular, épica ni nada. Un partido normal de semifinales. Épica es lo que tenemos que hacer los mallorquines para subsistir en nuestra tierra
el chulo piscinas este de Carlitos, que le llaman, no le llega ni a la suela de los zapatos a Nadal...ni como tenista ,,, ni mucho menos como persona....que habla con una prepotencia que no tiene ni educacion...no ha hecho nada y ya se quiere comparar con los grandes.. y esto por culpa de la prensa que le da bola,,, pobrecito chaval
Lo celebro por él. Por lo menos ya tenemos un sustituto para cuando se jubile Rafa.
Grande Alcaraz! Lástima que tenga que vivir a la sombra de Nadal por culpa de los medios. Si gana es un digno sucesor, si pierde es que nadie puede igualarle. Psicológicamente complicado para él
Rafa Nadal el pasa bolas pasapelotas showan etc.etc... esta ya acabado, muerto y enterrado para jugar al tenis ya no ganara ningun grand slam y carlitos el de los labios de llisa, nunca llegara a ganar 24 grands slams como Djokovic.ni 22 como Nadal ni 20 como Federer.
No se a qué viene mencionar a Nadal en un artículo que habla de la proeza de Carlos accediendo a la final de RG. Han buscado la estadística a propósito para meter a “Nadal” en negrita. Raro que no hayan puesto “El 14 veces ganador de….” Nos lo meten hasta en la sopa. Miras el partido y te sale el “Heliocare “ a cada cambio de pista. Cansinos que son.