Así ha sido la reconstrucción y restauración del monumento del IV Misteri de Lluc.

El arquitecto director de las obras, Joan Soler, con el aparejador Samuel Pérez y el constructor Joan Puigserver, ante el monumento ya reconstruido.

Los trabajos han sido complicados al trabajar con piezas de gran peso en un lugar poco accesible de montaña y sin usar maquinaria pesada.

Estado en el que quedó el monumento después de colapsar en septiembre de 2021 tras varios días de lluvias abundantes.

La colocación de las piezas ha sido compleja pues están talladas en piedra, con un peso total del conjunto cercano a las 220 toneladas.

Detalle de uno de los relieves de bronce del escultor modernista Josep Llimona que forman parte del monumento, y que han sido restaurados.

Para los acabados se han usado técnicas tradicionales de la época en que fue construido, como los morteros de cal.