Es Castell de Son Vida ofrece sus servicios hasta el 3 de noviembre

En el menú preparado por este chef de raíces toledanas y formación gastronómica vasca, empieza por unos aperitivos bien trabajados: una zamburiña con un particular ceviche de salsa nikkei; panipuri rellena de una melosa espuma de burrata con caviaroli de trufa, y una sabrosa loncha fina de chuletón madurado de vaca vieja, envuelta en un panini curado con sal.

El menú permite disfrutar de magníficas vistas de la bahía de Palma que ofrece el interior y la terraza del Castillo Hotel Son Vida

Le siguen como entrante, el tartar de salmón acompañado de unas finas migas de pan crujiente y mayonesa de kimchi. La degustación continúa con los dos principales. Un tierno y sabroso rodaballo al horno de vapor acompañado con un rossejat de fideos muy finos, y el toque mallorquín de un all i oli de tap de cortí. Y de segundo, Sous vide de carrillera de cerdo ibérico en salsa de chiles chipotles sobre cremoso de célery con cebollas caramelizadas.

Y para finalizar llega el postre. Una tarta de queso con un ligero toque de Cabrales mezclado con queso fresco, y el añadido de un crumble de jengibre y un desengrasante helado de lima. La degustación incluye los vinos Cercle Blanc, Rosat y Negre.

Fotos: Pere Bota