La legislatura ha sido bastante atípica en todos los municipios de la Isla, y Sencelles no es una excepción. El consistorio, encabezado por el alcalde Joan Carles Verd, se ha enfrentado a retos fuera de lo normal, intentando no dejar de lado la actividad del día a día. «La legislatura ha sido excepcional en todos los sentidos» afirma el alcalde. «Como pueblo y como administración nos hemos tenido que enfrentar a retos para los que no estábamos preparados y además con pocos recursos» añade Verd.
En el difícil marco de una pandemia, el trabajo no resultó fácil en ningún momento: «En las primeras etapas tuvimos que tomar muchas decisiones a ciegas, sin tener experiencia de ningún tipo en algo de tal magnitud, que nunca habíamos vivido». No obstante, el valor como pueblo imperó y se salió adelante, aunque esos meses dejaron muchos temas en el tintero. Recuperar la normalidad y el ritmo de trabajo fue entonces lo principal: «Teníamos muchos proyectos en marcha o pendientes de poner en marcha que se han retrasado significativamente. Ahora estando en la recta final de la legislatura, hay mucha actividad para ponerlos al día y poder cumplir con todos los compromisos que asumimos con el pueblo. Con ese fin su equipo de gobierno está tratando de últimar en todo lo posible los temas pendientes ante la próxima cita electoral «para dejar el camino más despejado posible al nuevo equipo, sea este cual sea» asegura Verd.
Lo que más satisfacción produce al alcalde de lo realizado en estos cuatro años han sido las mejoras en equipamientos para el pueblo, como «los nuevos aparcamientos o la reforma de la plaza. Esta ha tenido sus luces y sombras, pero creo que en lineas generales ha mejorado Sencelles y ha sido del agrado de los vecinos. Estamos aún así trabajando para ver todos los aspectos que sean mejorables».