Luli Pampín con toda su imaginación llega a Trui Teatre el 7 de enero

La gira de Luli Pampín tiene programadas actuaciones en muchas ciudades de España. De hecho llega al escenario de Trui Teatre después de pasar por Málaga, Madrid, Barcelona, para continuar después de Mallorca viajando a varias ciudades más, con lo que va a ser una de las novedades de la nueva temporada. Para muchos de sus seguidores, Luli ha sido hasta la fecha una youtuber sorprendente, que es capaz con su vestimenta y sus bailes de conectar con el público infantil, haciendo que los padres y acompañantes disfruten y muevan casi sin querer los pies bajo la butaca.

El personaje es una bailarina encerrada en una cajita de música y aterriza como regalo en la casa de los Pampín

El personaje que representa esta youtuber es una bailarina encerrada en una cajita de música que tiene la suerte de aterrizar como regalo en la casa de los Pampín. La función arranca cuando Luli aparece vestida de rosa, con una capa y un traje ajustado de superheroína y salta del baúl para contarnos que quiere viajar y pasarlo bien. Luli nos cuenta las ganas que tenía de salir de la caja, de ser libre y de viajar por el mundo. De hecho, el guión del espectáculo es de su propia cosecha y nos cuenta en primera persona un relato lleno de color e imaginación en el que ella es la protagonista de una aventura que tiene mucha relación con su propia vida.

Día 7 de enero, sesiones a las 12.30 horas y a las 17 horas

Luli Pampín es una argentina nacida en Mendoza hace 35 años, que se ha convertido en un auténtico fenómeno de masas de entretenimiento infantil. Sus vídeos alcanzan los 800 millones de visualizaciones y su canal en Youtube tiene más de 15 millones de seguidores. Este año quiere salir del formato audiovisual y del contacto con los niños a través de Internet, para vibrar con el sonido y la luz de salas llenas de espectadores que viven su relato con todo el poder de su imaginación.

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Luli se crió en el campo subiendo a los árboles, jugando y saltando. En una familia de cinco hermanos en el que la única chica era ella, pero claro, llegó el corralito y las dificultades económicas, con una inflación galopante que obligó a toda la familia a emigrar.
Se instalaron en Alicante, que era una ciudad más económica que Madrid o Barcelona. Y mientras estudiaba bachillerato, alguien le sugirió la posibilidad de alistarse en el ejército, dado que le gusta bailar y hacer deporte. «Yo soy una persona muy competitiva. Si tengo que escalar una montaña, voy a querer estar allí la primera. Y como mujer sentí que tenía que ser más fuerte».

Con 25 años, mientras vestía el uniforme de soldado, tuvo un niño y le tocó hacer de madre de verdad. Entonces se dio cuenta de que cuando era más feliz era cuando bailaba y le cantaba canciones a su hijo. Y así fue como decidió comprarse una cámara de vídeo, y con la ayuda de su hermano empezó a filmar sus actuaciones casi en plan familiar. Le gusta imaginar escenarios y situaciones, crear trajes vistosos, para luego montar sus propias coreografías. «La verdad es que durante dos años la cosa no fue nada fácil, pero un día, mientras contabilizaba el ejército, el coro del conservatorio y la afición a la interpretación, de repente vimos que cada día tenía más seguidores». Primero, unos cientos que ahora ya son miles.

Le gusta imaginar escenarios y situaciones, crear trajes vistosos, para luego montar sus propias coreografías

Y por qué no trasladar esta creatividad, estos relatos a los escenarios con público. Y de ahí surge la idea de montar una función con la finalidad de transmitir a los niños la idea de pasarlo bien, con personajes divertidos con los que Luli baila y se enfrenta a los malos, demostrando que los auténticos lulipampineros son valientes y divertidos.

FOTOS: cedidas por el equipo de Luli Pampín