TW
0

El precio de la vivienda nueva y usada en España creció en el cuarto trimestre un 4,1% respecto al mismo periodo del 2022 y del 1% respecto al tercer trimestre, según datos publicados este viernes por Tinsa.

De este modo se reafirma la desaceleración general y progresiva de los precios residenciales en España, que se moderan frente al 5% interanual del tercer trimestre, el 4,9% del segundo y 6,3% del primer trimestre del año, y sitúa la variación media en el conjunto del año 2023 en un 5,1%.

“El precio de la vivienda tiende paulatinamente hacia el entorno de la estabilización, un movimiento que es consistente con el descenso gradual de la demanda residencial que se observa desde finales de 2022, a medida que comenzó a trasladarse a la economía el impacto de la subida de los tipos de interés por parte del BCE”, explica Cristina Arias, directora del Servicio de Estudios de Tinsa.

Los precios residenciales en las zonas de costa continúan reflejando en este último trimestre una desaceleración más lenta que la media nacional, lo que, en opinión de Tinsa, guarda relación con la “existencia de una mayor demanda de segundas residencias para uso vacacional propio, asociada a un perfil de comprador con alto poder adquisitivo y menos sensible al impacto de la inflación y los tipos de interés a la hora de tomar su decisión de compra”.

En esta línea, destaca en la estadística el dinamismo sostenido de las ciudades costeras de Valencia (+10,6% interanual) y de Almería, Santa Cruz de Tenerife y Málaga, todas ellas con precios en torno a un 9% superiores a los del cuarto trimestre del año anterior. También las dos mayores capitales, Madrid y Barcelona, han experimentado un ligero impulso en este último trimestre y sitúan en +6,1% y +3,5%, respectivamente, la variación interanual en el cuarto trimestre del año (frente al 5,7% y 2% que registraron en el tercer trimestre).

La vivienda nueva y usada en España se ha revalorizado de media un 38,4% desde sus mínimos y se encuentra en niveles de precio del primer trimestre de 2011, un 18,3% por debajo de los máximos del cuarto trimestre de 2007, tras el boom inmobiliario.

BALANCE Y PERSPECTIVAS

Aunque el volumen de compraventas está siendo inferior al de 2022, se mantiene en niveles saludables, aún por encima de las cifras de 2019. “La comparativa con respecto a 2022 de las compraventas mensuales registra un ritmo de contracción cada vez menor, lo que también apunta hacia una estabilización de la demanda en torno a la media histórica de transacciones”, explica Cristina Arias.

En el caso de las hipotecas, impactadas directamente por la subida de tipos de interés y que han descendido de forma más acusada que las compraventas, el indicador mensual también muestra desde septiembre una desaceleración de las caídas interanuales.

El Servicio de Estudios de Tinsa destaca que la economía está mostrando resistencia y, de mantenerse las tendencias que señalan los actuales indicadores macroeconómicos, la moderación de la inflación irá restableciendo el poder adquisitivo de los hogares y la estabilización de los tipos de interés dejaría de penalizar el consumo y dinamizaría las inversiones. “Esta coyuntura apoyaría la estabilización de la demanda en torno a sus niveles medios de transacciones de compra a la par que sostendría los precios en el actual entorno de oferta limitada”, afirma la directora del Servicio de Estudios de Tinsa.

En las zonas más tensionadas, como los polos de empleo y las Islas Baleares, el elevado nivel de precios puede continuar impulsando el desplazamiento de la demanda local hacia zonas más asequibles.

Por comunidades, los mayores incrementos en tasa interanual se localizan en Navarra (+9,6%), Islas Baleares (+8,1%) y Comunidad Valenciana (+7,5%). Tan solo Murcia y Ceuta muestran crecimientos en tasa interanual inferiores al 2%.

El precio en la Comunidad de Madrid se mantuvo plano (0,0% trimestral) en el cuarto trimestre respecto al trimestre anterior, mientras que Cataluña registró un aumento del 2,5%, el segundo más elevado en tasa trimestral por detrás de la Comunidad Valencia (+2,8%). En líneas generales, el escenario es de estabilización, ya que suben de tres a nueve las regiones con variaciones trimestrales en torno a cero y otras siete se sitúan en el entorno del 1%.

Islas Baleares supera por tercer trimestre consecutivo el máximo de la serie histórica que alcanzó en el tercer trimestre de 2008. La Comunidad de Madrid es la segunda región más próxima a su referencia máxima del boom inmobiliario, situándose un 8,9% por debajo. En diez comunidades autónomas la caída acumulada respecto a los máximos todavía supera el 20%.