La líder del colectivo de ultraderecha Hogar Social Madrid (HSM), Melisa Domínguez, se ha reafirmado en el juicio del ataque a la Mezquita de la M-30 que lideró en marzo de 2016 tras los atentados múltiples de Bruselas por «financiar el yihadismo terrorista», manifestando que no se arrepiente de nada y que no cambiaría «ni una coma» del comunicado que entonces difundió por las redes sociales.
La protesta se produjo después de un ataque terrorista en Bruselas (Bélgica), en el aeropuerto internacional Zaventem y en la estación de metro Maelbeeck, con decenas de fallecidos y cientos de heridos.
La Fiscalía sostiene que en los mensajes posteriores se difundieron por las redes comentarios islamófobos «por su contenido vejatorio y de menosprecio hacia ese colectivo» que, además, generaron un clima «de clara hostilidad y violencia contra el mundo musulmán».
Por estos hechos, el fiscal solo acusa a Melisa Domínguez por un delito de incitación al odio, por el que se enfrenta a tres años de cárcel y 3.000 euros. Pero no se sienta sola en el banquillo de los acusados.
Le acompañan otras once personas acusadas por la Red Española de Inmigración y Ayuda al Refugiado, que ejerce como acusación popular, en relación a un delito de desórdenes públicos y cuyas defensas solicitan la libre absolución. En su declaración, tres de los acusados han negado haber participado en la concentración.
El juicio ha arrancado esta mañana en la Audiencia Provincial de Madrid a puerta cerrada por decisión del presidente de la Sección Quinta Penal. La vista continuará mañana con la prueba testifical. Una de las pruebas de cargo era el testimonio del vigilante de la Mezquita, la única persona que presenció el ataque al templo. Está en paradero desconocido.
En las cuestiones previas, la defensa de Melisa ha aportado a la Sala documentación para constatar que en el momento de la protesta existía una investigación en curso una célula yihadista radicada en esta mezquita y cuyos miembros resultaron condenados en septiembre de 2016 a 75 años de cárcel.
También se han entregado fotos de Melisa en la Embajada de Siria protestando contra el yihadismo y dando conferencias en Hogar Social Madrid por este asunto.
"no me arrepiente"
A su llegada, Melisa ha reiterado en declaraciones a los medios que en su protesta dijo «simplemente una verdad» y la «vuelve a decir hoy». «Desde la Mezquita de la M-30 se financia el yihadismo terrorista y es un problema que asola y sigue asolando a Europa. Una no se puede arrepentir», ha subrayado.
Durante el interrogatorio, el fiscal ha preguntado por qué se eligió ese escenario para el ataque; cómo se desarrolló la protesta; y cómo se difundió. También se ha inquirido a acerca de si profirieron gritos discriminatorios y si lanzaron bengalas al templo.
Melisa, que no ha contestado a la acusación popular, ha explicado al tribunal que la concentración fue «espontánea» ante la indignación que había por los atentados de Bruselas de ese mismo día.
Se optó, sin que hubiera una planificación previa, por la Mezquita de la M-30 por la investigación que había en curso en la Audiencia Nacional publicada por varios medios y ante «los indicios de financiación del terrorismo a través de una especie de impuesto revolucionario al rezo».
Además, ha detallado que se colocaron dos botes de humo en cada lado de la pancarta desplegada en la protesta, negando haber lanzado bengalas al interior del recinto. «No rectifico ni una coma de lo que dije», ha aseverado nada más concluir la vista oral.
Antes del juicio, el abogado Ignacio Menéndez ha apuntado que no se dan los elementos de los tipos penales de los que se acusa a su patrocinada, recalcando que los mensajes que se lanzaron no iban dirigidos contra ninguna persona en concreto ni contra la religión musulmana sino contra el terrorismo yihadista.
El letrado ha explicado que Hogar Social Madrid está afincado en el barrio madrileño de Tetuán, donde se encuentra a 200 metros la Mezquita Central. «Se eligió la de la M-30 porque ya había una investigación», ha insistido.
Comentarios islamófobos
En contra, el fiscal sostiene que como consecuencia «directa» de publicarse en redes sociales de dicha organización la protesta de un grupo de manifestantes frente a una mezquita aparecieron mensajes que justificaban la acción con «múltiples» comentarios islamófobos «por su contenido vejatorio y de menosprecio hacia ese colectivo» que, además, generaron un clima «de clara hostilidad y violencia contra el mundo musulmán».
En su escrito de acusación, el fiscal relata que la Asociación Hogar Social es de carácter asistencial y que su tarea se centra en la ayuda a familias «solo de origen español necesitadas económicamente».
En su calidad de representante de dicha organización, el 22 de marzo de 2016 la acusada colocó junto a un grupo de simpatizantes una pancarta en la pasarela de la M-30 y, a continuación, «encendieron bengalas para darla visibilidad».
La pancarta tenía como leyenda "Hoy Bruselas, ¿mañana Madrid? Y debajo se podían ver dos imágenes: una de un castillo rodeada por un circulo azul y a su lado una mezquita tachada y enmarcada en un círculo rojo.
Posteriormente el grupo se acercó a la Mezquita ubicada en la calle Salvador de Madariaga mientas proferían gritos de «Moros fuera» «Mezquitas abajo». Su actitud determinó que el vigilante de seguridad de ese lugar cerrara rápidamente la puerta principal de acceso para evitar la confrontación con las personas que se encontraban en su interior.
Ese mismo día se publicaron en el perfil de Twitter y de Facebook de Hogar Social «las primeras imágenes de la acción realizada hace un momento contra el terrorismo islámico en la Mezquita de la M-30 de Madrid, mezquita que financia al Estado Islámico, Mezquitas fuera de España».
Dicha publicación dio lugar a 434 comentarios y fue compartida 2.197 veces. Un día más tarde, la líder del colectivo realizó unas declaraciones en la cadena La Sexta en las que reivindicó y justificó la acción y el 24 de marzo se publicó en Youtube el vídeo frente a la mezquita de la M-30.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.