Cae un presunto grupo criminal especializado en robos en establecimientos a nivel nacional

Así lo han informado este miércoles en una rueda de prensa el jefe del Área Central de Investigación de Patrimonio de la División de Investigación Criminal de los Mossos d'Esquadra, el subinspector Jonatan Herrera, y el jefe del Área de Delincuencia Organizada de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, el teniente Raúl Rico.

Herrera ha explicado que la investigación se inició a mediados de enero, cuando se detectaron cinco robos con fuerza en diferentes establecimientos de Catalunya, entre los que había cajeros de 'bitcoins', tiendas de lujo y estancos.

Tras las primeras pesquisas, descubrieron que los autores eran personas que vivían en Madrid y que realizaban los robos en toda España, momento en el que decidieron realizar un operativo conjunto con la Guardia Civil de Madrid, que también estaba investigando otros robos con el mismo 'modus operandi'.

Los ladrones sustraían vehículos de lujo en Madrid, «les doblaban las placas de la matrícula para dificultar las labores de investigación» y se desplazaban hasta diferentes sitios de España como Albacete, Soria, Madrid, Tarragona y la provincia de Barcelona para cometer los robos durante la noche.

Rico ha explicado que los atracadores podían cometer hasta cuatro hechos delictivos la misma noche y «no dudaban en darse a la fuga en caso de encontrarse con presencia policial».

También ha explicado que, «en función del tipo de cerramiento de cada establecimiento», utilizaban el método de alunizaje o maza y, una vez disponían de los efectos sustraídos, tenían una red de receptores para venderlas en el mercado ilícito.

Detenciones

Finalmente, los agentes detuvieron este noviembre a seis personas, de entre 28 y 40 años, cuatro de ellas como presuntos autores materiales de los hechos y dos de ellos por cooperación necesaria que, una vez pasaron a disposición judicial, tres de ellos ingresaron en prisión.

Rico ha explicado que «algunos de los autores de los robos ya eran conocidos por la policía, ya que se han criado en la cultura del alunicero», y ha manifestado que los ladrones mostraban un alto nivel de vida y que algunas veces ocupaban viviendas en Catalunya para poder llevar a cabo robos en un periodo corto de tiempo.

Los agentes calculan que los ladrones --que suman un total de 235 antecedentes policiales-- han realizado un perjuicio económico de unos 850.000 euros, sumando los objetos sustraídos y los daños en los establecimientos.

Asimismo, los investigadores les han podido relacionar con 16 hechos delictivos «con pruebas sólidas», aunque hay hasta 38 hechos en fase de investigación.