Lo ha dicho en declaraciones a la prensa en la presentación de su libro 'El año de la pandemia: Del estado de alarma al inicio de la vacunación' en la sede de la Diputación Provincial de Huesca (DPH).
«Nos hemos dado una semana más de tiempo con Aragonès. Voy a respetar eso y guardar un punto de discreción», ha añadido Illa.
Cumbre hispanofrancesa
En relación a la Cumbre Hispano-Francesa que este jueves se celebra en Barcelona, Illa la ha calificado como una «buena noticia para Barcelona y Catalunya». «Quien quiera manifestarse puede hacerlo pero esperemos que con respeto», ha dicho.
Además, cree que Catalunya está en un «proceso de reencuentro consigo misma y con el resto de España», añadiendo: «Desde el inicio de esta legislatura he entendido que lo que tenía que hacer era construir una alternativa a un Gobierno que ha fracasado, colapsado», pero «una posición alternativa no está reñida con tender la mano y lo estoy haciendo en materia de Presupuestos».
Decisiones en pandemia
El también exministro de Sanidad ha manifestado que la perspectiva del tiempo le reafirma en que España y Europa actuaron con «decencia» en la pandemia.
«La perspectiva del tiempo me reafirma que España y Europa actuaron con decencia y viendo cómo ha ido en otros lares no ha ido tan mal», ha sostenido.
Ha indicado que lo más difícil en una pandemia es el «tiempo de reacción» y «tomar decisiones en un entorno sin certeza, con mucha incertidumbre y poca información». Aunque en su opinión, «habrá que hacer un balance sereno con espíritu constructivo para aprender la lección», su balance habla de «una respuesta decente del conjunto de la sociedad».
Illa ha considerado que «siempre hay camino de mejora», pero que se acertó en dar «un enfoque pro ciencia» desde el principio, en respetar y dar el papel que le correspondía a las comunidades autónomas y municipios, en tener en cuenta las recomendaciones de las organizaciones internacionales, en particular la OMS y contar a la ciudadanía «lo que sabíamos y lo que no, sin miedo a cambiar de criterio cuando teníamos nueva información». Estos fueron, según ha dicho, los cuatro pilares en la gestión de la pandemia.
Además, ha señalado que el epidemiólogo Fernando Simón es una «persona especial», un «gran servidor público que reúne tres características» que no ha encontrado en una misma persona fácilmente«. Así, ha dicho que »es un buen experto en su ámbito de trabajo, que es la epidemiología, es un buen gestor y un buen comunicador".
En su opinión, «una persona fundamental en la pandemia» y al que guarda «una estima personal muy alta». Salvador Illa ha apostillado que «la crisis sanitaria llegó y reaccionamos lo mejor que supimos y pudimos; se hizo con decencia».
Ha expresado que en este libro cuenta «lo que fue un año muy difícil que cambió un poco la vida a todos», pretende «ser un homenaje a los españoles en su conjunto por la actitud en este episodio» y también ser «una reivindicación de la política entendido como un servicio público». Tras la presentación de su libro en Huesca, Illa se ha desplazado a Barbastro para hacer lo propio en un acto en el Centro de la UNED.
Por su parte, el alcalde de Huesca, Luis Felipe, ha recordado que «ningún responsable institucional ni ningún ciudadano tenía una hoja de ruta ni un manual a seguir para una situación extraordinaria y nueva» y ha realzado el trabajo realizado por Illa al frente del Ministerio de Sanidad, «un hombre prudente, que tiende puentes y que entiende la política como forma de servir a la población».
Felipe, que ha moderado el acto celebrado en la DPH y al que han asistido 200 personas, ha mencionado que Salvador Illa «fue capaz de gestionar una situación compleja contando con la cooperación y colaboración con toda la estructura institucional de España y trasladando a los ciudadanos seguridad y serenidad en esos momentos tan complicados».
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