El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha decidido mantener el juicio contra la presidenta de Junts, Laura Borràs, por presuntamente fraccionar 18 contratos cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC), pese a que su defensa pidió suspenderlo alegando «indefensión», y ha aceptado que Borràs declare al final del juicio, una vez expuestas todas las pruebas.
En la sesión de este martes, que el tribunal añadió al calendario para terminar el trámite de cuestiones previas, los magistrados han rechazado suspender el juicio porque no consideran que los cambios que la Fiscalía ha añadido a última hora a su escrito de acusación sean «esenciales» ni produzcan indefensión a Borràs, como sí cree su defensa.
El juicio seguirá el lunes 20: estaban previstos los interrogatorios de los tres acusados, pero solo declararán Isaías H. y Andreu P. después de que el tribunal haya aceptado la petición para que Borràs declare al final del juicio, que está previsto que acabe el 1 de marzo.
En sus declaraciones, Isaías H. y Andreu P. previsiblemente evidenciarán su acuerdo con la Fiscalía y confesarán a cambio de una rebaja de la petición de penas, que las fiscales pueden incorporar en las conclusiones finales del juicio.
La Fiscalía pide para Borràs 6 años de cárcel, 21 de inhabilitación y multa de 144.000 euros por los presuntos delitos continuados de prevaricación y falsedad documental; y la acusación provisional reclama para el beneficiario de los contratos, Isaías H., 6 años de cárcel y 3 para Andreu P., que supuestamente lo ayudó a preparar los presupuestos y facturas que presentaba a la ILC.
Supuesta investigación paralela
Otro aspecto que ha planteado la defensa de Borràs en las cuestiones del juicio es una supuesta investigación paralela de la Fiscalía, que según su versión mantuvo abiertas unas diligencias previas cuando el caso ya estaba judicializado y en manos de un instructor, lo que sería contrario a la ley e invalidaría las pruebas recabadas.
«No solo es grave, sino que nos sitúa en un escenario de mucho miedo como ciudadanos», ha afirmado el abogado Gonzalo Boye sobre esta supuesta investigación paralela con la que la Fiscalía hizo al menos cuatro requerimientos de información.
La Fiscalía, por su parte, ya detalló en la sesión del viernes que las diligencias indeterminadas que Boye reprocha --las 42/21-- son en realidad las mismas que las 42/22 --que corresponden a esta causa-- y achaca la confusión a un error al teclear.
Se retomará el lunes
El presidente del TSJC, Jesús María Barrientos, ha explicado que el tribunal resolverá en la próxima jornada de juicio --el lunes 20-- las cuestiones previas que afectan a derechos fundamentales.
En este sentido, en la sesión del viernes Borràs esgrimió que el TSJC no es el tribunal competente para juzgarla porque «ya no es aforada» al haber sido suspendida como presidenta del Parlament a raíz de la apertura de juicio en esta causa.
También apeló a su derecho a un juez imparcial por supuestas desavenencias políticas con Barrientos y la presunta vulneración de su presunción de inocencia por un «juicio paralelo» de declaraciones públicas.
Por su parte, la defensas de Isaías H. y de Andreu P., alegaron fallos y defectos formales en la instrucción para tratar de invalidar pruebas recabadas.
Guardia civil
Entre los nuevos testigos que el tribunal ha aceptado está, a propuesta de la defensa de Borràs, una doctora en cultura digital de la Universidad de Finlandia, Giovanna di Rosario, y en cambio los magistrados han rechazado que testifique el exconseller de Cultura de la Generalitat Lluís Puig.
La Sala también ha acordado pixelar la imagen de los guardias civiles que comparezcan en el juicio, como pidió el cuerpo.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.