Las trabajadoras de intervención social se han concentrado este jueves frente a la Diputación Foral de Bizkaia para anunciar la convocatoria de las dos jornadas de paro. De forma previa, han organizado para el día 16 de mayo una movilización.
Los representantes sindicales han afirmado que, tras más de año y medio sin renovar el convenio y «la friolera de 19 mesas de negociación», las trabajadoras han decidido «dar un paso adelante para luchar contra medidas que ponen en riesgo su salud y emprobrecen sus condiciones de trabajo».
Ante esta situación, han denunciado «la urgente necesidad de acordar medidas que aboguen por un cambio en el modelo de atención y en la seguridad laboral. También han censurado que los máximos responsables públicos, Diputación Foral de Bizkaia, ayuntamientos y Gobierno Vasco hablen de las grandes bondades de sus políticas sociales encaminadas hacia un sistema universal e inclusivo a través de la aplicación del Decreto de Cartera de Prestaciones y Servicios del Sistema Vasco de Servicios Sociales», pero, sin embargo, toman «medidas para llevar a la exclusión a cientos de trabajadoras del sector de Intervención social».
Tras recordar que este colectivo, «al igual que en otros ámbitos de los cuidados, tienen cara de mujer», han reclamado «enérgicamente a las instituciones publicas y patronales avanzar en reivindicaciones» que, a su juicio, son «esenciales».
En esta línea, han reclamado incrementos salariales por encima del IPC, recoocimiento de actividades de especial protección, acabar con la modificación sustancial de las condiciones de trabajo, las 35 horas semanales, complementos de bajas al 100%, sustituciones desde el primer día, estabilidad en el empleo, planes de igualdad y mejoras en materia de conciliación.
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