Las 46 localidades restantes se incorporarán al nuevo servicio a lo largo de este mes de junio, cuando esté operativa la planta de transferencia de Borja.
Será entonces cuando Ecoprovincia alcance el 100 por 100 de su capacidad dando servicio a una población de 195.000 personas tras una inversión de 24 millones de euros financiada íntegramente por la Diputación de Zaragoza. Además, en las últimas semanas han sido varios los ayuntamientos que todavía no se habían adherido al servicio y que han dado ese paso.
«En total cada año vamos a gestionar unas 76.000 toneladas de basura que hasta ahora se enterraban directamente en un vertedero y que gracias a Ecoprovincia se transportan en camiones hasta el Centro de Tratamiento de Residuos Urbanos de Zaragoza para reciclar los desechos que aún tienen una segunda vida», ha destacado el presidente de la Diputación de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero. «Además, en el CTRUZ los materiales que pueden valorizarse se usan para producir biogás, compost, energía eléctrica», ha apostillado.
Sánchez Quero también ha subrayado que con el servicio Ecoprovincia «todo son ventajas para los municipios». «La gestión de sus residuos es mucho más sostenible y además la Diputación de Zaragoza se hace cargo de todos los costes de transportarlos hasta Zaragoza, lo único que tienen que pagar los ayuntamientos es la diferencia entre la tasa por usar el CTRUZ y la que pagaban hasta ahora por enterrar su basura en un vertedero», recuerda el presidente.
Ecoprovincia y su funcionamiento
Ecoprovincia es un servicio público impulsado por la Diputación de Zaragoza para que todos los municipios zaragozanos puedan reciclar la basura del contenedor verde y dejen de enterrarla sin ningún tratamiento previo cumpliendo así la legislación española y europea, que obliga a reutilizar al menos el 50% de los residuos domésticos y comerciales.
Para hacerlo posible, la DPZ ha construido seis plantas de transferencia en distintos puntos de la provincia en las que se recibe y se compacta la basura como paso previo a su transporte hasta el CTRUZ en camiones estancos de 24 toneladas que por su gran capacidad de carga permiten optimizar cada desplazamiento.
Las plantas de transferencia
Las planta de Ejea de los Caballeros, que centraliza los residuos de los 31 municipios las Cinco Villas, se puso en marcha el 26 de abril; la de La Almunia de Doña Godina funciona desde el 10 de mayo para dar servicio a 43 ayuntamientos de Valdejalón, el Campo de Cariñena y el Aranda; y el pasado viernes empezó a operar la de Quinto, que por ahora recibirá las basuras de 23 municipios de la Ribera Baja del Ebro, el Campo de Belchite y el Bajo Aragón-Caspe;
Además, este jueves se ha puesto en marcha la planta de transferencia de Calatayud, de la que dependerán 102 ayuntamientos de la Comunidad de Calatayud y el Campo de Daroca y que cada año gestionará unas 17.000 toneladas de residuos.
La siguiente instalación en incorporarse al sistema será la de Borja, que lo hará a lo largo de este mes de junio y dará servicio a 34 municipios del Campo de Borja y Tarazona y el Moncayo.
Será entonces cuando Ecoprovincia empiece a funcionar al 100 por 100, ya que esta instalación recibirá temporalmente los residuos de los 17 ayuntamientos de la Ribera Alta del Ebro hasta que se ponga en marcha la planta de Alagón, que aún está en obras pero que se espera que pueda terminarse a lo largo del mes de junio.
Personal y medios materiales
La gestión de las plantas de transferencia y el transporte de los residuos en camión hasta Zaragoza han sido adjudicados a la empresa Actúa Servicios y Medio Ambiente S. L. Cuando funcione al 100 por 100 de su capacidad, Ecoprovincia contará con 7 cabezas tractoras y 19 semirremolques estancos de 24 toneladas y empleará a 25 personas, entre conductores y operarios.
El nuevo servicio dispone de un sistema informático de gestión que permite la integración y el seguimiento de todos los elementos incorporados al sistema garantizando la trazabilidad de los residuos.
Por un lado, se registran todos los datos de los camiones de basura que llegan a las plantas de transferencia: toneladas que transportan, hora, fecha, matricula y conductor, entre otros. Por otro, también incorpora los datos de los camiones que llevan los residuos hasta el CTRUZ. Tanto las cabezas tractoras como los semirremolques cuentan con equipos embarcados que permiten el seguimiento en tiempo real de las rutas, las distancias recorridas, los tiempos.
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