Presentación del operativo para el Tour en Bilbao. | Europa Press

TW
0

Las instituciones vascas han puesto en marcha un operativo de seguridad y movilidad «sin precedentes» para el paso del Tour de Francia por Euskadi los próximos 1, 2 y 3 de julio, que provocará importantes restricciones de movilidad tanto para vehículos como para peatones. Por ello, han pedido a la ciudadanía que planifique sus desplazamientos «con tiempo» y usen el transporte público.

El operativo integral «sin precedentes» diseñado con motivo del Grand Départ Pays Basque 2023 ha sido presentado este lunes en Bilbao por el vicelehendakari y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, junto a los concejales de Seguridad Ciudadana de Bilbao, Amaia Arregi, y de San Sebastián, Martín Ibabe, y de Deporte y Salud de Vitoria, Livia López, y el alcalde Amorebienta-Etxano, Andoni Agirrebeitia.

El plan, coordinado entre las entidades vascas involucradas en seguridad pública de Euskadi, se ha elaborado tras «meses» de trabajo en coordinación con la organización del Tour y cuerpos de seguridad fraceses cuyos agentes participarán en él. El máximo mando corresponde a la Ertzaintza, que aportará 1.700 agentes cada día al operativo, y el centro neurálgico y logístico se ubicará en el BEC de Barakaldo.

Durante la presentación, los responsables institucionales han pedido la colaboración de los ciudadanos ante las imporportantes restricciones que se van a producir en la movilidad durante las tres etapas del Tour que discurrirán por 108 localidades vascas.

Por ello, ha animado a los ciudadanos a que «planifiquen con tiempo su movilidad» durante esos días, se informen con antelación suficiente de las restricciones y, sobre todo, usen el transporte público.

El consejero ha advertido de que a las limitaciones derivadas del propio recorrido ciclista, se suma el hecho de que coincida con las fechas de la Operación Salida de Verano y la Operación Paso del Estrecho, con especial afección a la frontera de Irun, la AP-8, la N-1 y la AP-1.

Las restricciones afectarán al acceso a los aeropuertos, sobre todo el de Loiu y Hondarribia, y al recorrido y paradas del transporte público. Asimismo, se verán afectados «los accesos y salidas de los centros de trabajo, citas sanitarias, celebraciones y demás actividades lúdicas preparadas para esos días».

Por este motivo, se han diseñado unos «rutómetros» oficiales del Tour, con las horas estimadas de paso de la caravana publicitaria y de la carrera ciclista, que se pueden consultar en la página del Grand Départ Pays Basque y en los canales de atención a incidencias de tráfico. Además, proximamente se cargarán en la App Waze, que además ofrecerá rutas alternativas.

Según ha explicado el responsable de Seguridad, la Ertzaintza y las policías locales de Euskadi cortarán calles y carreteras del circuito de la carrera, como mínimo, cuatro horas antes de la hora a la que esté previsto que discurra en cada punto del recorrido, ya que dos horas antes de la salida de los corredores discurrirá una caravana festiva y de animación.

Durante ese tiempo, la carretera estará totalmente cerrada a vehículos. Además, en el caso de las cuatro localidades (las tres capitales vascas y Amorebieta-Etxano) en las que se celebran salidas y llegadas de cada etapa los cortes van a tener una duración «muy superior».

La Ertzaintza ha establecido 166 puntos por los que podrán acceder en condiciones de seguridad los servicios de emergencias y de extinción de incendios, solo en sentido de la carrera y previa autorización. También se han diseñado 2.190 puntos de corte, en los que habrá equipos de seguridad controlando potenciales accesos prohibidos a la carrera.

Estarán controlados por la Ertzaintza y las policías locales, pero, además, la Academia Vasca de Policía y Emergencias ha organizado una acción formativa, con 500 estudiantes de la última promoción, que irán acompañados por agentes de la Ertzaintza. El operativo contará con el apoyo 1.800 Tour Lagunak que se ocuparán de la información a la ciudadanía.

La Ertzaintza ha catalogado como críticos 66 puntos en los que se redoblará la presencia policial, como altos de montaña, esprints especiales o zonas de avituallamiento. En estos puntos, se realizará un control exhaustivo de los vehículos que pretendan estacionar fuera de las zonas habilitadas y habrá cortes de tráfico más rigurosos, de incluso 24 o 48 horas.

Durante los días previos a la carrera, se limpiará el circuito de todos los «obstáculos» señalados como peligrosos para la seguridad de los corredores. Por ello, se recomienda a la ciudadanía informarse previamente en sus respectivos ayuntamientos para evitar que los vehículos estacionados en el circuito sean retirados por las grúas.

Además del operativo general, las cuatro localidades que son salida o llegada del Tour han presentado los planes específicos que han diseñado. En el caso de Bilbao, las primeras restricciones se adelantarán a la tarde del 28 de junio ya que se celebrarán actividades en los días previos, entre ellas la presentación de equipos.

Garantizada

Preguntado por las protestas del colectivo 'Ertzainas en lucha' --quienes afirman que carecen de medios para garantizar la seguridad de la prueba--, el consejero de Seguridad ha insistido en que el operativo «cuenta con unas garantías de seguridad máximas» y ha sido diseñado «por grandes profesionales» de la Ertzaintza, en «estrecha colaboración» con policías locales. «Yo confío plenamente en ellas», ha asegurado.

Erkoreka ha señalado que, en función de los mensajes que han dirigido desde «ese movimiento», apuntan a que su objetivo «no es hacer daño al Tour» ni «boicotear» la prueba.

«Yo creo que nadie tiene la voluntad de boicotear, impedir o dificultar el libre desarrollo de una prueba tan escrupulosamente diseñada, tan garantizada desde el punto de vista de seguridad, como fruto de una labor de coordinación entre todas las policías locales y la Ertzaintza. Creo que nadie está en condiciones de poder dudar de que se podrá celebrar con éxito», ha incidido.

Erkoreka ha eludido pronunciarse sobre las últimas críticas del colectivo 'Ertzainas en lucha', que han censurado al jefe de la Ertzaintza, Josu Bujanda, haberles «faltado al respeto» al compararles con «terroristas» y han reprochado al Lehendakari que, si se hubieran adoptado medidas durante la última década, «hoy no tendría a miles de ertzainas en su contra».

Por contra, se ha limitado a reiterar que «la seguridad del Tour está garantizada». «Nadie puede poner en cuestión la calidad de ese diseño y la garantía absoluta de que la seguridad está totalmente certificada en Euskadi, fruto de la participación de grandes profesionales y de la cooperación, de la Ertzaintza y Policías locales», ha añadido.

Tras advertir de que «eso no se puede poner en cuestión», ha añadido que «si alguna persona individualmente o algún colectivo o grupo de personas considera, pese a todo, que quiere boicotear» la prueba ciclista, «pues siempre lo puede hacer».

«En la sociedad, pueden emerger colectivos que están en desacuerdo en que se celebra el Tour y demás, y expresar su desacuerdo con lo demás, pero nunca podrá ser la falta de seguridad un pretexto para defender esas posiciones», ha advertido.

El responsable vasco de Seguridad ha reiterado que «cada uno defenderá lo que tenga que defender, defenderá sus intereses, sus aspiraciones y demás, pero nunca con el pretexto de que su aspiración tiene una relación de causa-efecto con la garantía de la seguridad del Tour».

«La seguridad del Tour está garantizada plenamente. A partir de ahí, cada uno verá qué medidas se han adoptado para defender sus intereses y aspiraciones», ha concluido.