El ministro de Asuntos Exteriores y Unión Europea, José Manuel Albares, ha reivindicado este lunes la coordinación con las comunidades autónomas, ayuntamientos y sociedad civil para organizar el semestre de la Presidencia española del Consejo de la Unión Europea (UE).
Así se ha pronunciado en un acto en el Cidob para explicar las prioridades de la Presidencia del Consejo, donde también han intervenido el presidente de este 'think tank', Antoni Segura, y su director, Pol Morillas.
El ministro también ha puesto en valor el papel del Congreso y de las administraciones territoriales, y ha explicado que se ha acordado un documento con las comunidades autónomas sobre las perspectivas y prioridades de la Presidencia española.
«Se han aprobado 22 reuniones ministeriales que van a recorrer España. Esta será la primera Presidencia en que todas las comunidades autónomas acogerán al menos un consejo de nuestra Presidencia», ha destacado Albares, que ha asegurado que va a haber 83 actos autonómicos en el programa oficial de la Presidencia.
Albares ha añadido que el Gobierno también ha trabajado con los partidos políticos en la comisión mixta de la Unión Europea en el Congreso y el Senado, así como en el Parlamento Europeo, donde celebró una reunión con los eurodiputados, y ha reprochado que el PP «decidió voluntariamente no participar de ese consenso y no acudir a la reunión».
Además, ha subrayado que el Gobierno ha impulsado un foro de la sociedad civil, «una iniciativa única hasta ahora», para organizar con ellos la Presidencia europea, y también han complementado este trabajo un grupo de expertos en temas europeos.
Unidad y solidaridad europea
El ministro ha sostenido que la Presidencia llega a España «en el momento más complejo y convulso para Europa desde la caída del muro de Berlín», con la guerra de Ucrania, y ha asegurado que esta situación obliga a la UE a avanzar aún más como actor geopolítico, tras lo que ha llamado fortalecer la unidad y la solidaridad europea.
Ha alertado de que los valores europeos están siendo «desafiados desde fuera de Europa, pero también desde dentro, con opciones políticas extremas», y ha defendido que el apoyo a Ucrania es una obligación moral de la UE para evitar que la ley del más fuerte guíe el orden internacional, en sus palabras.
Albares ha apostado por que en este semestre se avance en el proceso de adhesión de países candidatos, «para evitar una frustración y un hastío por su parte», entre los que ha mencionado Ucrania, Moldavia, Bosnia y Herzegovina.
Ha destacado que durante la Presidencia española se puede «dar un paso» en las negociaciones de la adhesión de Ucrania, así como en la revisión del Pacto de migración y asilo.
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