Vista de Fuensanta de Martos | AYUNTAMIENTO DE FUENSANTA DE MARTOS

TW
0

Fuensanta de Martos y Larva son dos de los primeros municipios jiennenses que han tenido que recurrir a los cortes nocturnos de agua con el objetivo de poder recuperar niveles en sus depósitos donde los recursos hídricos no fluyen como antes debido a que los manantiales y pozos de los que se surten se encuentran bajo mínimos como consecuencia de la sequía.

El alcalde de Fuensanta de Martos, Antonio Navas, ha explicado a Europa Press que llevan desde principios de julio con restricciones tras detectar que los tres depósitos municipales estaban «bajo mínimos. »Debido a la sequía y a las altas calores, el consumo de agua está siendo excesivo para lo que nuestros tres manantiales generan", ha indicado el alcalde.

Los cortes comenzaron de 23,00 a 7,00 horas, pero se vio que «no eran suficientes» porque «se seguía generando menos agua de la que los habitantes de Fuensanta consumían». Por eso, la semana pasada se restringió en dos horas más, de 22,00 a 8,00 horas. «Tenemos una aplicación que nos dice al momento los niveles de cada depósito y ahora mismo estamos en el mínimo, en el nivel mínimo de los depósitos», ha señalado el alcalde.

La solución pasa por engancharse al sistema Víboras-Quiebrajano. «Sabemos que desde la Junta de Andalucía hay un proyecto de enganche al sistema Víboras Quiebrajano y sabemos que ahora mismo está licitado solamente el proyecto», ha señalado Navas.

«Lo que nosotros pedimos a la Junta de Andalucía es que se licite lo antes posible el proyecto» para así poder comenzar las obras y «subsanar» esta situación, que no es nueva en el municipio, donde se han vivido cortes más o menos puntuales en otros años de sequía, pero no «con tanta intensidad como ahora».

Fuensanta cuenta con 3.100 habitantes, una población que no se incrementa en verano, con lo que el consumo de agua se mantiene más o menos estable para esta época del año. Desde el Ayuntamiento se ha revisado toda la red para evitar posibles fugas y «todo está correcto, lo único es eso, que nuestros manantiales, por desgracia, pues no generan el agua que tenían».

Por eso piden la conexión con el sistema Víboras-Quiebrajano, una obra que fue declarada de interés de la comunidad en 2020, perque se encuentra todavía con la licitación del proyecto, «ni siquiera con las obras licitadas o en puertas de ser licitadas».

Por el momento, según el alcalde, no se ha recurrido a tener que suministrar agua embotellada a la población, pero es una opción que está presenta si finalmente hay que ir aumentando el número de horas de restricción.

Otro municipio que también ha tenido que recurrir a los cortes nocturnos es Larva, con una población que no llega al medio millar de habitantes que se abastecen de dos pozos que, según ha indicado a Europa Press la alcaldesa, María de los Ángeles Leiva, se encuentran «si no agotados, sí bajo mínimos».

Además, en Larva, se suma el problema de los parámetros alterados en lo que respecta a cloruros y sulfatos, lo que ha llevado al Ayuntamiento a tener que suministrar botellas de agua a la población, en tanto en cuanto los análisis practicados no arrojen los resultados adecuados y exigidos por la normativa sanitaria.

Los cortes, según informa el Ayuntamiento de Larva en su perfil en redes sociales, se están llevando a cabo desde el pasado 14 de julio, desde las 23,00 horas hasta las 7,00 horas. Se trata, según la alcaldesa, de medidas que se adoptan desde el Consistorio cuando «el depósito se nos viene abajo» porque no le entra agua suficiente para garantizar el abastecimiento a la población.