A partir de los análisis realizados y la labor investigadora de la ULAR, unidad compuesta por personal del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y de la Unidad de Análisis e Investigación Fiscal y Fronteras --Udaiff-- de la Guardia Civil del Puerto de Sevilla, se detectaron dos envíos de paquetería, uno con cinco kilos de cogollos de cannabis y otro con algo más de cinco kilos de hachís con destino Alemania, según la información facilitada por el Instituto Armado en un comunicado de prensa.
A partir de ese momento, se iniciaban las actuaciones necesarias para el descubrimiento y localización de los responsables del envío en España antes de que abandonaran el país, dando como resultado la puesta a disposición judicial, en calidad de detenido, de un ciudadano alemán momentos antes de abandonar el territorio nacional, y de un segundo individuo en calidad de investigado no detenido.
En el marco de la misma operación, la ULAR procedió también a la detención y puesta a disposición judicial de otra persona, de nacionalidad española, a la que se le incautaron quince kilos de cogollos de cannabis. De acuerdo con las investigaciones, esta persona solicitaba muestras gratuitas de unos cinco kilos de cogollos cada una a distintos «proveedores» de otros países de Europa, en especial de Italia, con la «excusa» de establecer una relación comercial futura si la mercancía era de calidad.
Tras la intervención de los envíos a Alemania, los investigadores realizaron una actuación no conectada con la anterior, pero que podría tener el mismo 'modus operandi'. En una empresa de mensajería de Sevilla detectaron un envío con destino Reino Unido en cuyo interior se localizaron cinco kilos de cogollos de marihuana y tres kilos de hachís. Continúan las investigaciones abiertas, por lo que no se descartan más detenciones.
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