En su discurso de toma de posesión, ha aseverado: «Nuestro servicio a la nación que contribuimos a firmar hace ya cinco siglos sigue plenamente vigente» y «la voluntad de los ciudadanos no puede estar condicionada por minorías que pretenden deshacer una convivencia que nos ha llevado a la prosperidad al conjunto de los españoles en la mejor etapa de nuestra historia».
Azcón se ha expresado así en su discurso de toma de posesión de su cargo de presidente de la Comunidad Autónoma, que se ha celebrado en el patio de Santa Isabel del Palacio de La Aljafería de Zaragoza, sede de las Cortes de Aragón, donde, este jueves, el pleno de la Cámara le ha elegido presidente con los 28 votos del PP, los siete de VOX y el del representante del PAR.
En su intervención, a la que ha asistido también el presidente saliente, el socialista Javier Lambán, el nuevo jefe del Ejecutivo regional ha aseverado que ser leal a España significa, para los aragoneses, «participar activamente de su construcción» desde el carácter específico de la Comunidad Autónoma y, también, «evitar que prosperen los proyectos que pretenden desmembrar o deshacer esa nación que por fin encontró, en la democracia, la libertad y el respeto su manera más acertada de existir».
Tras afirmar que el voto ciudadano es «lo más sagrado» en democracia, ha prometido realizar todo su esfuerzo para «construir e impulsar un Aragón mejor, con más oportunidades para todos los aragoneses y del que todos podamos sentirnos orgullosos».
Ha recalcado su compromiso con Aragón y con los aragoneses, también «con el conjunto de la nación española y su devenir», lo que constituye «el significado último de cumplir y hacer cumplir la Constitución y de cumplir y hacer cumplir el Estatuto de Autonomía». Se ha comprometido a «defender Aragón por encima de todo».
No ha resultado sencillo
Jorge Azcón ha hecho notar que a España, «nuestra nación, no le ha resultado sencillo estar donde está» porque «numerosos fracasos jalonaron los dos siglos que nos precedieron», cuando «parecía que nuestra convivencia a través de la libertad era imposible porque esta resultaba permanentemente cercenada por la violencia de guerras o revoluciones, titubeos o incertidumbres, sufrimientos y penurias, condenada indefectiblemente al fracaso».
«Hemos sido capaces de edificar una democracia que cumple ya 45 años de historia», ha celebrado Jorge Azcón, añadiendo que el Estatuto de Autonomía «ha sido determinante en nuestro crecimiento e identidad», ha continuado el nuevo presidente aragonés.
«Todos y cada uno de los aragoneses participamos a través de la Constitución y el Estatuto en la unión de nuestro destino al de nuestros compatriotas», ha manifestado Azcón, para añadir que «el resto de españoles son nuestros hermanos, compañeros de camino con diferentes acentos, que en la unidad disfrutan de características distintas y que desarrollan sensibilidades que nos completan».
Camino de éxito
Los aragoneses, «gentes de nobleza y honor», desean seguir recorriendo «el camino de éxito» al lado «de todos ellos, sin quedarnos atrás e incrementando la lealtad ya demostrada».
A su juicio, «es tal la importancia de Aragón para España que no es casual que muchos de los proyectos políticos que pretenden destruirla nos intenten utilizar como diana para tratar de resquebrajar el proyecto común de 1978» y por eso Aragón debe mostrarse «firme» en la defensa de la Constitución y el Estatuto. Ha citado a Joaquín Costa para decir: «Los aragoneses, por serlo, somos doblemente españoles».
«Éste es el más hermoso proyecto de libertad y democracia, cuyo valor se fundamenta en la aceptación de las decisiones de los ciudadanos en las urnas», ha proclamado Azcón, quien ha sido tajante: «Defender la Constitución y el Estatuto debe ser un compromiso personal y sincero», que sea «exquisitamente respetuoso con la voluntad mayoritaria de los ciudadanos».
También ha señalado que el cargo de presidente de la Comunidad tiene una dignidad y una competencia que van «mucho más allá» de lo que él soñó en sus comienzos políticos. «No puede haber mayor honor para un aragonés que recibir este encargo de ocupar la Presidencia de la Comunidad Autónoma», lo que hará «hasta que los ciudadanos decidan otra cosa».
Mirada ambiciosa
El nuevo presidente ha prometido que su Gobierno desplegará «una mirada ambiciosa, que identifique un horizonte elevado al que dirigirse y al que encaminar esta Comunidad», haciendo notar que los Ejecutivos no tienen éxito, únicamente, por las medidas que toman, sino porque «son capaces de convocar a todos, sin excepción, al impulso individual y colectivo necesario para poner en marcha grandes proyectos y tratar de gestionar, en último término, su consecución exitosa».
Por último, ha hecho referencia a los niños y jóvenes aragoneses, señalando que el Gobierno de Aragón, más allá del Ayuntamiento del municipio en el que viven, es «la institución más cercana que tienen a su alcance para comprender la sociedad a la que pertenecen».
Ha emplazado a todos los asistentes al acto a «ser el mejor de los ejemplos y que les entreguemos dedicación, complicidad y cercanía» para que comprendan que «el acuerdo es mejor que la imposición, el diálogo suena mucho más fuerte que los gritos y el esfuerzo es el único camino que conduce a la excelencia».
El acto ha comenzado con la bienvenida de la presidenta de las Cortes, Marta Fernández, a las autoridades, tras lo que se ha dado lectura al Real Decreto de nombramiento de Azcón como presidente, tras lo que éste ha jurado su cargo. Al acto han asistido los miembros de la Mesa del Parlamento autonómico y numerosos diputados, así como otras autoridades.
Además, por parte del PP han acudido diferentes cargos y compañeros, como la vicesecretaria de Políticas Sociales y Reto Demográfico del PP, Carmen Fúnez, el 'president' de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, el presidente del PP Catalán, Alejandro Fernández, o el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Alcorcón y diputado por Madrid, Antonio González Terol.
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