En un comunicado, el Ayuntamiento ha explicado este miércoles que los agentes acudieron a una vivienda del barrio de Coronación, donde anteriormente había intervenido la Ertzaintza.
Según ha explicado el Consistorio, en el domicilio se encontraba la mujer con sus hijos menores, quien manifestó a los agentes que durante
su relación había soportado coacciones y vejaciones.
Asimismo, informó que, tras comenzar una nueva relación sentimental, estaba sufriendo acoso por parte de su expareja y mostró el terminal telefónico a los agentes, quienes comprobaron la recepción de llamadas de acoso a la que estaba siendo sometida.
La víctima explicó a los agentes que esa misma mañana acudió a la policía autonómica, a causa de los insultos y amenazas que había recibido por parte de su expareja sentimental, al querer éste recuperar unas pertenencias que tenía en el domicilio.
Finalmente, por mediación de un conocido, el hombre se personó en el domicilio, «desprendiendo un fuerte olor a alcohol». Los agentes, ante el acoso, amenazas y coacciones referidas, así como la intención de denunciar estos hechos por parte de la víctima, procedieron a la detención del varón.
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