La investigación se ha desarrollado, liderada por agentes de la Comisaría alavesa de Laudio, tras realizar a finales de septiembre una primera intervención policial contra el cultivo de marihuana en una zona rural que se saldó con la localización de una plantación de marihuana de interior en Amurrio.
Con la información obtenida, los ertzainas se dirigieron el pasado 11 de octubre a un caserío de la localidad vizcaína de Orozko, donde localizaron un invernadero dotado de sistemas de videovigilancia y ventilación, así como dos casetas de aperos que desprendían fuerte olor a marihuana utilizadas a modo de laboratorio.
En estas casetas, ha explicado la Consejería, «se localizó un arcón frigorífico lleno de bolsas de marihuana, tres centrifugadoras para la extracción del polen de hachís y una liofilizadora de uso farmacéutico para su transformación en tabletas o para la extracción del jugo o rosin, así como papel de horno necesario en dichos procesos».
En el lugar se personó el propietario del caserío, que manifestó a los ertzainas que los terrenos eran utilizados por una tercera persona. En el interior de la vivienda, los recursos policiales localizaron una plantación de marihuana indoor, así como fertilizantes y aparatos para el cultivo.
Junto a la plantación, se hallaron 738 recortes de plantas en fase de secado, cogollos de marihuana, y en el interior de dos congeladores, botes con hachís en polvo y ocho bolsas de marihuana.
Por estos hechos se procedió a la detención del morador del caserío por un presunto delito contra la salud pública. Ese mismo día, los ertzainas se dirigieron a la localidad de Amurrio, al domicilio de la persona que presuntamente utilizaba los terrenos de Orozko. En la casa, se localizaron dos plantaciones indoor que contenían 490 plantas hembra.
En la inspección del resto de la vivienda se localizaron 225 plantas de marihuana de entre 40 y 90 centímetros de longitud, 17 bolsas de marihuana, más de un millar de semillas junto a envases para individualizarlas, una prensa para la elaboración de rosin, cinco envases con flores «macho» congeladas para la fertilización de las plantas hembra, productos fitosanitarios, así como aparatos para el cultivo en interior.
En el registro también se localizaron 12 frascos con rosin, con una concentración de tetrahidrocannabinol, componente psicoactivo del cannabis superior al 60%, potencialmente peligrosa para la salud, han precisado desde Seguridad.
No se descartan nuevas detenciones
El implicado fue, a su vez, arrestado por otro presunto delito contra la salud pública. Finalmente, los dos arrestados fueron puestos a disposición de la autoridad judicial una vez finalizadas las diligencias pertinentes y quedaron en libertad con medidas cautelares.
La Ertzaintza, por su parte, prosigue con las investigaciones, por lo que no se descartan nuevas detenciones, según ha explicado el Departamento de Seguridad.
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