La investigación policial su inició tras la denuncia de la hija de la víctima, quien manifestó en sede policial que desde el mes de julio una mujer se estaba encargando del cuidado personal de su padre y, a partir de ese momento, la salud de su progenitor había empeorado «considerablemente» y el anciano se encontraba hospitalizado, según ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.
Durante la estancia en el hospital, la víctima relató a su hija que la cuidadora había realizado ciertos cambios en la vivienda del anciano, como la sustitución de la cerradura de la puerta principal. Por ello, la denunciante decidió visitar la vivienda para corroborar estos hechos.
Una vez dentro de la vivienda, la hija de la víctima constató que los cofres y cajas fuertes que eran propiedad del hombre estaban abiertos, sin ningún signo de forzamiento y ya sin los 30.000 euros que se encontraban en su interior.
Además, la denunciante se percató que una de las tarjetas de crédito propiedad de su padre había desaparecido y en una de las cuentas bancarias de su progenitor se había producido un cambio de titularidad. Por este motivo, la denunciante volvió a Comisaría para ampliar dicha información a los investigadores.
Los agentes realizaron las gestiones de investigación policial con la entidad bancaria y corroboraron que la ahora detenida supuestamente intentó extraer con la tarjeta propiedad del anciano 800 euros, pero finalmente no fue posible porque no conocía en número pin.
Asimismo, descubrieron que la investigada, un mes antes, presuntamente acudió en compañía de la víctima y le hizo cancelar una cuenta de 50.000 euros, con el objetivo de transferirlos y abrir una nueva donde figurasen ellos dos como titulares. De esta forma, conseguía tener la total disposición de ese dinero.
Finalmente, los policías lograron las pruebas documentales necesarias para corroborar fehacientemente el hecho delictivo, así como la plena identificación de la autora de las infracciones, por lo que procedieron a su inmediata detención. La detenida, de 52 años, fue puesta a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Benidorm.
Los agentes consiguieron recuperar en su totalidad el dinero sustraído, que fue de nuevo ingresado en la cuenta de la víctima. La investigación ha sido llevada a cabo por agentes del grupo V de Policía Judicial de la Comisaría de Policía Nacional en Benidorm, encargados de las investigaciones de delitos patrimoniales.
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