Fuentes consultadas por Europa Press en Cetursa, la empresa pública que gestiona la estación invernal, han detallado que, con bombas de agua y compresor de aire, este nuevo centro neurálgico para la producción de nieve se prevé se pueda activar al cien por cien la semana que viene con la llegada de un frente frío que durará al menos dos días.
En este contexto climatológico, caracterizado este otoño hasta el momento por temperaturas más cálidas, la fecha del 2 de diciembre, adelantada este viernes por el director de Cetursa Sierra Nevada, Jesús Ibáñez, a Canal Sur Radio, toma cuerpo frente a la del 25 de noviembre, en cualquier caso antes del puente festivo de la Constitución, que es cuando las estaciones de esquí tratan de activar el inicio de sus temporadas en España.
El pasado 20 de octubre, las zonas más altas de Sierra Nevada se cubría, tras el paso de la borrasca Aline, de un manto blanco de nieve en zonas superiores a entre los 2.500 y los 2.600 metros de altitud, lo que supuso un aliciente de cara al inicio de la temporada invernal.
La nieve cuajó en la mitad superior del dominio esquiable, con zonas como la de Borreguiles nevadas en la mañana de ese día, con en torno a un espesor de diez centímetros de nieve, que pudieron subir hasta los 20 en el entorno del Veleta.
El efecto, indicaron desde Cetursa, es positivo para el terreno por lo que significa de enfriamiento y humidificación tras meses especialmente áridos. Además puso las bases para un «cambio de mentalidad» para la industria de la nieve en Granada, Andalucía y España.
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