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El concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Zaragoza, Miguel Ángel García Muro, ha sido relevado de su cargo por la alcaldesa, Natalia Chueca, apenas cinco meses después de su nombramiento y será sustituido por el responsable de la concejalía de Zaragoza Vivienda y de Infraestructuras y el Ciclo Integral del Agua, José Miguel Rodrigo, como medida de «refuerzo estratégico» del área.

Así lo han confirmado fuentes municipales a Europa Press, argumentando que José Miguel Rodrigo cuenta con un perfil «jurídico y administrativo» acorde con un delegación de estas características, además de atesorar experiencia en materia de movilidad, puesto que tiene representación en la Sociedad de Economía Mixta (SEM) Los Tranvías de Zaragoza.

Por su parte, Miguel Ángel García Muro mantiene la competencia de Transformación Digital. Este cambio de perfil se produce en medio del problema con la solicitud de las ayudas directas al transporte público terrestre, urbano e interurbano en el ámbito local, reguladas por el Real Decreto-ley 5/2023, para bonificar el precio de los billetes de autobús.

El Ayuntamiento de Zaragoza ha presentado alegaciones al no aparecer en el listado de beneficiarios debido a «un error administrativo de tipo informático», según han confirmado tanto la alcaldesa como el consejero municipal de Urbanismo, Víctor Serrano. No obstante, el Consistorio local todavía está a la espera de recibir una respuesta por parte del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, que lidera el socialista Óscar Puente.

Necesidad de gobierno estable

Por su parte, el portavoz del grupo municipal de VOX en el Ayuntamiento de Zaragoza, Julio Calvo, ha manifestado su «sorpresa» por el «cese» de García Muro. Ha añadido que, a falta de explicaciones por parte del equipo de gobierno, «solo se pueden hacer conjeturas».

En este sentido, ha sugerido la posibilidad de que el relevo esté relacionado con la «descoordinación» en el traspaso de poderes en el área, «que causó, quizá», que no se solicitasen las ayudas al transporte urbano.

«Este cese está trasladando una imagen de inestabilidad y falta de confianza de la alcaldesa en su equipo. Zaragoza necesita un gobierno más sólido y estable para afrontar las dificultades que se avecinan», ha zanjado.