La Catedral de Huesca celebra el 'Tota Pulchra' que, como es tradición, se canta la víspera de la Inmaculada

Este oficio de vigilia de la Inmaculada Concepción de María es una de las grandes festividades marianas, que se celebra anualmente en la Catedral de Huesca la tarde del día 7 de diciembre.

Es un acto litúrgico catalogado de Bien de Interés Cultural (BIC), en el que participan tres instituciones que desde el siglo XV mantienen el voto a la Inmaculada Concepción, que son la académica, heredera de la Universidad Sertoriana, que está en la actualidad representada por el claustro de profesores del IES Ramón y Cajal; la municipal, que está representada por el Ayuntamiento de Huesca; y la eclesiástica, a través del cabildo catedralicio.

El canto del 'Tota Pulchra' contará con el coro de la capilla de música de la santa iglesia catedral de Huesca, dirigido por el profesor de orquesta y coro del conservatorio de Huesca, José Vicente Pardo Bellido.

La alcaldesa de la ciudad, Lorena Orduna, ha comentado que «es un acto muy querido en Huesca» y anima a los oscenses a vivir de cerca esta celebración.

Participar de la historia

Por su parte, la directora del IES Ramón y Cajal, María Costa, ha apuntado la decisión del claustro de profesores de dar continuidad a esta tradición oscense.

Año tras año se consolida el fiesta del Voto en la capital altoaragonesa con este acto y es que se conserva testimonio documental del voto que realizaron las instituciones oscenses a la Inmaculada Concepción en el año 1450, con motivo de la epidemia de peste que asoló la ciudad, pero fue otro brote de esta enfermedad, en el año 1651, el que lleva a la ciudad y a sus instituciones a renovarlo el 4 de octubre, día de San Francisco de Asís.

En el año 1652 se cumple por primera vez con el voto tras su renovación y se celebra con una procesión desde la Catedral de Huesca hasta el convento de San Francisco portando la imagen de la Virgen de la Concepción, también llamada Virgen del Voto. Tras la desaparición del convento franciscano en el siglo XVII, la vigilia de la Inmaculada se celebra en la Catedral y de esta forma se consolida, cada año, la fiesta del Voto en Huesca.

La alcaldesa de Huesca ha destacado que este acto evidencia lo que fue la Huesca antigua y difunde su historia.