Presidida por el administrador diocesano, don Julián Ruiz Martorell, con asistencia del Cabildo Catedral, la Corporación municipal y el claustro de profesores del instituto Ramón y Cajal, heredero de la antigua Universidad Sertoriana de Huesca, se ha desarrollado la celebración este 7 de diciembre, como es tradición, han indicado desde la Diócesis de Huesca.
Además, ha contado con el coro de la capilla de música de la Santa Iglesia Catedral de Huesca y una orquesta de músicos oscenses, unidos para este acontecimiento. Todos bajo la dirección del profesor de orquesta y coro del conservatorio de Huesca, José Vicente Pardo Bellido, y el canto de Marina Lansac.
Este acto se lleva a cabo todos los 7 de diciembre desde el voto realizado por las instituciones de la época en 1450, a causa de una epidemia de peste que asoló la ciudad. Un coro y una orquesta interpretan algunos himnos litúrgicos, entre ellos el 'Tota Pulchra es, María'.
Tras la recepción del concejo y los herederos de la Universidad Sertoriana en la puerta de la catedral, comenzó una procesión claustral con el canto del 'Ave Maris Stella', seguida de una oración, salmo, aleluya y evangelio. Después, intervino el administrador diocesano, a lo que continuó el preces, el canto del 'Tota Pulchra', una oración, la Salve de Hilarión Eslava a cuatro voces y orquesta y, por último, una procesión claustral del regreso a la sacristía.
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