Archivo - Una persona hace la compra. Imagen de archivo. | Fernando Sánchez - Europa Press - Archivo

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La Dirección General de Consumo de la Junta de Andalucía, a través de los Servicios de Consumo Provinciales, participa en la campaña de inspección en el marco del Plan Nacional de Control Oficial de la Cadena Alimentaria (Pncoca) 2021-2025, destinada a controlar el cumplimiento de la normativa vigente que afecta a los productos alimenticios comercializados en Andalucía, así como la existencia de alteraciones, adulteraciones o fraudes en el área de la alimentación.

Dicha campaña, que comenzó en el mes de junio, según señala la Consejería de Salud y Consumo en un comunicado, es de ámbito nacional, y sólo en la comunidad autónoma andaluza contempla la revisión del etiquetado de 648 productos alimenticios para comprobar su adecuación a la normativa y para garantizar el derecho a la información de las personas consumidoras.

Asimismo, el personal inspector controla posibles alteraciones, adulteraciones o fraudes, y para ello se ha previsto la toma de 81 muestras de productos alimenticios para su análisis en un laboratorio.

La Inspección de Consumo de la Junta de Andalucía va a realizar controles sobre frutas y vegetales, productos de confitería, sal, especias, sopas, salsas, ensaladas y productos proteínicos, cereales y productos a base de cereales, postres, grasas, aceites y sus emulsiones (sin aceite de oliva).

En concreto, se va a revisar el cumplimiento de los requisitos que la normativa que regula cada uno de estos productos alimenticios establece, ya se presenten envasados o a granel, y en formato de venta en establecimiento o a distancia.

Además de la vigilancia de los establecimientos donde se venden alimentos, las actuaciones también se desarrollarán en comercios minoristas situados dentro de los mercados de abastos municipales y en los establecimientos donde se venden productos alimenticios importados.