Andalucía propone que las mutuas puedan tramitar bajas y altas por enfermedad común para aliviar la sanidad pública

En una entrevista en Canal Sur Radio recogida por Europa Press, Blanco ha asegurado que por lo que conoce de la propuesta de «autobajas» que plantea el Ministerio de Sanidad «quizá se haga recaer la carga del requisito en los pacientes» y ha defendido que «es el momento de reivindicar el papel de las mutuas colaboradoras con la Seguridad Social para que atiendan a los trabajadores con enfermedad común».

«Las mutuas son entidades público-privadas, al trabajador tiene que verlo un médico porque tiene que garantizar que no tenga una patología más grave y ello permitiría aligerar las bajas de los servicios públicos de salud, que están colapsadas», ha añadido la titular andaluza de Empleo, que ha planteado que las altas también puedan ser tramitadas por las mutuas «por silencio positivo del médico, si el médico no contesta».

Blanco se ha mostrado partidaria de «utilizar todos los recursos que tenemos» y ha apostado por la modificación del Real Decreto 625/2014 relativo a los periodos de incapacidad temporal durante los primeros 365 días, que establece en su artículo 2 que las declaraciones de baja deben hacerse con un parte expedido por el médico del Servicio Público de Salud y en caso de accidente de trabajo por la mutua colaboradora.

"al margen del diálogo social"

«Pienso que lo primero que tienen que hacer es modificar eso. No es una línea que pueda emprender el Ministerio de Sanidad así con una instrucción, sino que tiene que haber una colaboración con el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social para modificar la normativa de la Seguridad Social», ha indicado la consejera, que ha pedido actuar «con prudencia y cautela» y ha criticado que el Gobierno plantee «una medida de este calado que afecta a trabajadores, empresarios y comunidades autónomas al margen del diálogo social».

Blanco ha rechazado que la propuesta del Ministerio sobre las «autobajas» no se puede «equiparar a lo que se hizo durante la pandemia porque entonces existía un estado de alarma y además el médico expedía la baja tras una una videoconferencia o una llamada previa con el médico del Servicio Público de Salud».

«Tenemos que sopesar y ver las cosas en su justa medida porque la baja es un acto médico que exige todas las garantías y, además, es un acto administrativo que es hasta recurrible por vía administrativa e incluso judicial», ha insistido antes de recordar que «en las mutuas las patologías también las ve un facultativo».