Las 'Magues de Gener' marchan en València por el "derecho" a celebrar una fiesta "inclusiva, laica y diversa"

Bajo el lema 'Por el derecho a la celebración de la cabalgata de las Magues de Gener', la marcha --convocada por la asamblea de la Festa de la Infantesa-- se ha iniciado a las 11.00 horas desde el Parterre.

Una de las integrantes de la asamblea y portavoz de Intersindical Valenciana, Beatriu Cardona, ha señalado que el desfile se ha producido en forma de manifestación porque el equipo de gobierno municipal --integrado por PP y Vox y liderado por María José Catalá-- «ha decido que los niños y las niñas de València no tengan derecho a una fiesta diversa con cultura valenciana y con las mujeres como protagonistas». «Esto se llama censura y es antidemocrático», ha reivindicado.

Cardona ha indicado, en declaraciones a los medios de comunicación, que, gracias al micromecenazgo de 8.000 euros que ha aportado la ciudadanía de València y alrededores, han podido llenar las calles con «el color de la diversidad» y «la fuerza de las mujeres».

Otro portavoz de la organización y presidente de la Coordinadora Memorialista del País Valencià (CAMDE-PV), Ángel González, ha señalado que, «como se ha prohibido la cabalgata, se han visto obligados a notificar a la Delegación del Gobierno la celebración de una manifestación», donde «las comparsas se han ido incorporando» y «'les magues' han ido a pie».

Las 'Magues de Gener', que este año han sido Maria Colomer, Clara Moltó y Àngela Nzambi, han representado a 'Libertad', 'Sororidad' e 'Igualdad'. Por ello, han expresado que se sienten «muy orgullosas» porque son unos valores «muy fundamentales» para «una sociedad democrática». «Resulta una pena que no se pueda hacer la cabalgata», han lamentado y han reivindicado «la alegría por la infancia, la cultura, la lengua y la educación laica».

Diversos grupos han acompañado de manera altruista a las 'Magues de Gener' durante la manifestación, entre ellos, la Jove Muixeranga de València, La Llavor dolçaina i tabal d'Almenara, Moradores Cultura, Rebombori batukada, entre otros. Asimismo, han marchado payasos, grupos de bailes bolivianos, charangas, un grupo de manifestantes vestidas de sufragistas y otras vestidas de morado.

Las mujeres vestidas de sufragistas han llevado carteles con lemas como 'Per la llibertat d'expressió', 'Pel dret a la celebració de la festa de Magues de Gener' y 'Hartas de juguetes sexistas'.

"¿qué problema tiene la alcaldesa con una cabalgata?"

El exalcalde de València y concejal de Compromís en el Ayuntamiento, Joan Ribó, en declaraciones a Europa Press, ha censurado que la formación pidió que la fiesta fuera «como los últimos ocho años», pero «la alcaldesa de la ciudad la ha censurado».

«¿Qué problema tiene la alcaldesa con una cabalgata celebrada después de la fiesta de los reyes magos y de las fiestas de Navidad?», ha cuestionado Ribó, al tiempo que ha afeado que la anulación de la cabalgata «solo se puede entender como un planteamiento totalmente de derechas que no tolera más allá de lo que Catalá considera como bueno».

Asimismo, Ribó ha matizado que la manifestación es «diversa» porque hay «gente creyente, laica y de todo tipo» porque «València es una ciudad plural con muchísima diversidad» y es «una manifestación de pluralidad».

«Me hubiera gustado que las 'magues' hubiesen subido al balcón del Ayuntamiento como lo pueden hacer todas las personas», ha añadido Ribó, a la vez que ha destacado que «las pancartas de otros años se han suprimido del consistorio», una acción que ha calificado como «una falta de libertad de expresión y un derecho básico de cualquier sociedad democrática».

Por su parte, la edil de Compromís Lucía Beamud ha demandado que el gobierno local «debe dar apoyo a todas las actividades que se realicen en el dominio público municipal que son muy variados y diversos». «Hay que entender que València y su ciudadanía es muy diversa, por ello, es necesario que desde las instituciones miren con una sonrisa a la diversidad y la abrace, ya que tiene una riqueza intrínseca y, sin eso, se estarían perdiendo muchos de los valores democráticos», ha concluido.