La secretaria general de la Federación de Servicios Sociosanitarios de CCOO Aragón, Delia Lizana, ha asegurado que el sindicato ha elaborado un informe para ensalzar la figura del celador, «porque es nuestro primer contacto con el sistema público de salud y el último porque son los que nos acompañan a la salida».
Lizana también ha pedido al Ejecutivo autonómico que facilite el plan de reordenación de recursos humanos, «una fotografía de los profesionales que tenemos en el SALUD y las plazas que se necesitan cubrir, algo que no nos ha facilitado».
En este sentido, la secretaria general de la FSS en Aragón ha reclamado, también, mayor inversión para la sanidad pública, en concreto un 7,2 por ciento del Producto Interior Bruto.
Según el estudio confederal, la edad media de un celador, en España, está en los 41 a 55 años casi el 53,05 por ciento se engloban en esta franja de edad.
Por su parte, el secretario de negociación colectiva de la FSS, Mario Lolumo, ha asegurado que según el informe el 82 por ciento de las personas que han participado opinan que para trabajar de celador tendría que existir una titulación de Formación Profesional específica.
«Como ocurre con los técnicos de emergencia sanitarias que cuentan, desde hace varios años, con una formación específica para el personal que desarrolla su labor en las ambulancias y que sirven para que tengan los conocimientos apropiados», ha asentado.
Lolumo ha aclarado que para participar en las pruebas de selección para celador no exigen ninguna titulación, pero en los exámenes y en el desarrollo de su profesión si necesitan conocimientos sanitarios específicos para realizar su labor.
Colectivo "feminizado"
De esta manera, ha concretado que el colectivo de celadores está «mayoritariamente feminizado» debido a que del total de celadores en la sanidad pública aragonesa, el 65,94 por ciento son mujeres --945-- y el 34,06 por ciento hombres (488).
En este punto, ha señalado que es necesaria «una actualización de las funciones porque están publicadas en el Boletín Oficial del Estado del año 1971, son preconstitucionales y machistas». «Cuando se publicó este documento solo había celadores hombres y actualmente hay más mujeres, una feminización que seguirá creciendo con los años», ha asegurado.
De esta forma, ha apuntado que el estatuto actual dicta que hay funciones específicas para el género masculino los cuales solo pueden realizar funciones de aseo, baño o rasurado a enfermos masculinos. «En la actualidad, hay un mayor porcentaje de celadoras que realizan estas funciones por lo que la actual normativa es incongruente y obsoleta», ha aseverado.
El sindicato alerta que el 77,11 por ciento del total de celadores que hay en el SALUD tienen un contrato fijo 1.105 sanitarios y el 22,89 por ciento son temporales --328--, «un porcentaje altísimo para cubrir la demanda de personal necesaria».
Convocatorias de empleo
Para reducir la eventualidad, CCOO ha instado a que se convoquen las ofertas pendientes de empleo público aprobadas en el Boletín Oficial de Aragón en los años 2022 y 2023 que sumarían 126 plazas de celador.
También, ha solicitado que se agilice la resolución de la oferta extraordinaria para la estabilización del empleo de 158 plazas, con estas dos medidas se cubrirían 284 vacantes y se reduciría el índice de temporalidad al 3 por ciento.
«En Aragón estamos en una ratio de 1,06 celadores por 1000 pacientes y tendríamos que llegar a 1,20 celadores por 1000 pacientes», ha criticado Lolumo.
Asimismo, ha considerado que los celadores se sienten poco reconocidos en su labor, «así lo confirma» el 56,80 por ciento del total de personas encuestadas y el 65,69 por ciento no se sienten valorados por la administración, es decir Ministerio de Sanidad y Servicios del Salud de las comunidades autónomas.
«El 82 por ciento de los encuestados consideran ser considerados personal sanitario. En la pandemia fueron las ultimas personas a las que se facilitaron las mascarillas, tuvimos que pelear para que se las facilitaran porque no tienen esa clasificación profesional», ha lamentado Delia Lizana.
CCOO ha hecho especial hincapié a que el Gobierno de Aragón vigile las condiciones laborales de esta categoría, ya que del total de encuestados, un 46,86 por ciento considera que sus condiciones no son seguras siempre. También un 48,09 por ciento y un 39.94 por ciento aseguran que padecen o han padecido una sobrecarga de trabajo.
«El estrés también afecta mayoritariamente a las celadoras y celadores ya que más del 80 por ciento lo ha sufrido, lo que supone un riesgo psicosocial para su salud», ha manifestado.
Casos de gripe
«Ante el colapso de las urgencias en esta pandemia de gripe, CCOO ha constatado la necesidad de contratar de un mayor número de celadores en los hospitales y centros de atención primaria de Aragón. En el hospital Miguel Servet se ha reforzado esta figura porque es el celador el que traslada a esos pacientes dentro del hospital. Porque nadie va solo a hacerse una prueba», ha apostillado Lizana.
La secretaria de la FSS de CCOO Aragón ha recriminado al actual Gobierno autonómico «porque hace un año estaba en la oposición, parecía que estaban completamente preparados para asumir esta situación y desde luego no lo han hecho». «Han gestionado muy mal esta nueva pandemia de gripe y no trasladan ningún dato a las organizaciones sindicales para que podamos ofrecer opciones de mejora», ha subrayado.
Finalmente, ha reconocido que «es una situación que se repite, año tras año, sin que se haga nada por solucionarlo». «Hemos sido conocedores del colapso sanitario debido a la presencia de nuestros delegados y delegadas sindicales en los centros sanitarios y podemos aportar ideas para mejorar la asistencia a los usuarios», ha concluido.
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