Como hito fundamental dentro de la ejecución del proyecto, el museo ha organizado un acto institucional, abierto a los medios, para dar a conocer el estado del proyecto, cuyos trabajos, a partir de ahora, harán visible ya la configuración del nuevo volumen sobre el nivel de rasante.
Este acto ha contado con la presencia del lehendakari Iñigo Urkullu, quien ha visitado la obra junto a otras autoridades, patronos del museo y el principal equipo técnico al frente del proyecto de ampliación.
La visita ha servido para conocer «la complejidad y gran exigencia» de los aspectos técnicos y operativos de la nueva construcción, tal y como ha resaltado el director de la pinacoteca, Miguel Zugaza, quien ha recordado que el proyecto ganador del concurso internacional, «se eleva sobre las construcciones de 1945, 1970 y 2001 para escribir un nuevo capítulo en la vida de la institución».
La dirección del proyecto -Luis Maria Uriarte, Taba Rasti y Pablo Urango- y el ingeniero responsable del proyecto de estructuras -Álvaro Serrano- han detallado aspectos técnicos para «dimensionar y conocer el detalle constructivo de la obra».
En esta fase se desarrollará la construcción de la totalidad de la estructura aérea que constituye el volumen Agravitas, que contendrá el nuevo espacio de exposiciones y actividades educativas BBK Museoa.
Zugaza ha asegurado que, si bien hasta esta colocación del primer pilar en V, la obra estructural apenas se percibía ya que transcurría en el subsuelo en torno a las labores de cimentación, «a partir de ahora los avances en la configuración del volumen de la ampliación serán visibles tras superarse la fase de intervención en el subsuelo y en la base de la estructura», ha resaltado.
Sobre seis pilares en v
En este punto ha destacado que, a partir de ahora, «el proyecto empezará a elevarse para, paradójicamente, ir perdiendo peso progresivamente a medida que vaya ganando altura, al igual que las grandes esculturas de Chillida», ha significado Zugaza.
El director del museo ha explicado que sus seis pilares en V, colocados tres a cada lado del edificio actual, son de 71 centímetros de diámetro y 11,5 metros de longitud cada uno, y, con su disposición, se busca «aportar sensación de ingravidez al gran volumen soportado y dialogar con la estructura natural de los árboles con los que se alinean en los dos ejes de sustentación», ha enumerado.
En esta línea, Zugaza ha subrayado que, con la creación de la nueva estructura, avanzan también las intervenciones que articularán el espacio de entrada al museo, que trazará un eje norte-sur, conectando las plazas Euskadi y Chillida, y fortalecer, de este modo, «la cohesión del museo con el contexto urbano» para rodear y comunicar el museo en un eje público.
En este sentido, 'Agravitas' ha sido concebido como un «edificio puente» que sobrevuela los edificios existentes y genera un gran espacio en el centro del citado eje: la plaza del Monumento a Arriaga, que queda ahora integrada dentro del espacio interior del museo.
Reto constructivo
Los responsables del proyecto han destacado que la ampliación cuenta con una complejidad añadida al desarrollarse «en el centro de la ciudad» y estar obligado a «respetar las arquitecturas del propio museo y el arbolado de su entorno», condicionamientos, estos, han explicado, que suponen «un reto constructivo excepcional».
Así el transporte, la colocación y el ensamblaje en altura de cada una de las piezas que componen la estructura deben ser analizados detalladamente para salvar las cotas superiores de los edificios y las copas de los grandes plátanos que flanquean los laterales del museo.
Además, esta coreografía constructiva se ha secuenciado de tal modo que permitirá mantener abiertas diferentes partes del museo durante el transcurso de la obra para poder continuar con su actividad.
Fases y plazos
El inicio de la obra aérea permitirá a partir de ahora observar el avance de la ejecución de la ampliación. La finalización de la estructura de cubierta y fachada del volumen de la ampliación está prevista para finales de este año.
A esta actuación se irán sumando el resto de las fases para la finalización del nuevo volumen (envolvente, instalaciones), junto con la sucesiva entrega de los edificios reformados. La visión de conjunto mantiene el objetivo presupuestario en 44,5 millones de euros y la inauguración del proyecto será a lo largo de la primavera de 2025.
La comparecencia ha servido para resumir la evolución de las primeras fases de la ejecución del proyecto, cuyos primeros trabajos han consistido en la construcción de los cimientos para la sustentación del nuevo edificio en los llamados Eje 10 (Arriaga) y Eje 20 (Parque).
Sobre esa cimentación se apoyará el volumen de la ampliación, que concentrará sus cargas exclusivamente en seis puntos de apoyo, tres en el lateral que da al parque de Doña Casilda y los otros tres en la plaza del monumento a Arriaga.
Además, se han desarrollado los trabajos de ejecución del nuevo núcleo de comunicación vertical que van a compartir el edificio de 1970 y el nuevo volumen. Este núcleo integra una pantalla estructural de hormigón armado de 16,2 m -actualmente en construcción- que proporcionará estabilidad al edificio.
En paralelo a las labores de cimentación de la nueva estructura, se ha llevado a cabo un proceso de rehabilitación e ignifugado de las infraestructuras existentes, afectando principalmente a la planta sótano del edificio antiguo (1945) y al conjunto del edificio contemporáneo (1970).
El objetivo de estas actuaciones es «poner en valor el patrimonio existente y adaptarlo a los requerimientos de la normativa actual en materia de protección civil y contra incendios».
En este punto se ha recordado que, además de construir los 6.000 m2 de la ampliación aérea que sobrevuela la estructura ya existente, se van a reformar más de 8.000 m2 de la edificación actual.
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