Carmen Muñoz, de Bedeak Equo, y Alba García, candidata a lehendakari de Sumar. | Europa Press

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La candidata a lehendakari de Sumar, Alba García, ha asegurado que el objetivo de la coalición en la próxima legislatura será trabajar para que «no se cierre ni una sola aula pública en Euskadi», con la finalidad de lograr «el fortalecimiento y el crecimiento de la escuela pública».

En rueda de prensa en Bilbao, junto a la coportavoz de Berdeak Equo, Carmen Muñoz, Alba García ha dado a conocer las principales líneas de actuación de Sumar en materia de educación.

Alba García ha afirmado que la pasada ha sido una legislatura perdida en materia educativa, ya que «lo que tenía que ser una ley para reformar la escuela pública, se convirtió en una ley aprobada por el PNV y el PSE que opta blindar la educación concertada-privada y que va en contra de la escuela pública».

Con la Ley de Educación aprobada, «la administración se retrae y renuncia a planificar, dirigir y organizar la educación, así que cada centro privado recoge lo que puede, ya que la administración se lo garantiza, y con la red pública, escolariza al resto». «Esto es un disparate porque, si la administración renuncia, ¿quién queda?», se ha preguntado.

La candidata de Sumar ha dicho que «la propuesta política de EH Bildu sobre educación lo único que hizo y que hace es blindar la red concertada, financiándola al 100% y sin cambiar la titularidad de los centros que podrán seguir siendo privados».

En Sumar, ha remarcado, tienen claro que la escuela pública debe ser «la prioridad de un gobierno que defienda la igualdad de oportunidades y que combata la segregación escolar, que abandone la escuela pública como mejor garantía democrática de las políticas públicas progresistas para que nuestro alumnado crezca con las mismas oportunidades y que se eduque en dos lenguas en Euskadi».

Esto, ha advertido, supone «el blindaje de la educación pública y los recursos necesarios, materiales y humanos». Asimismo, ha añadido que este «blindaje y fortalecimiento de la escuela pública pasa por dar pasos contra la segregación escolar y contra el sistema dual», pero «pasos valientes y audaces, más allá de las buenas palabras».

Entre otras propuestas, Alba García ha planteado «iniciar un proceso de publificación, que ya tuvo lugar en Euskadi hace unos años, para que las aulas y centros públicos puedan ser la base del sistema educativo vasco».

Este proceso, ha apuntado, debe «partir del diálogo con todos los agentes implicados y debe ser respetuoso con los ritmos y garantista con los derechos, pero muy firme en su objetivo», que tiene que ser que «todos los alumnos vascos sean escolarizados en el futuro en una red pública vasca fortalecida».

Alba García ha insistido en la necesidad de «acabar con la segregación escolar, que va en contra de los principios fundamentales de igualdad de oportunidades», y, para ello, ha señalado, son necesarias «medidas eficaces», como «el incremento de recursos para el profesorado, más capacitación, medidas de refuerzo para el alumnado y la inclusión de la euskera en estos refuerzos».

La candidata a lehendakari ha asegurado que, en la próxima legislatura, el objetivo de Sumar será trabajar para que «no se cierre ni una sola aula pública en Euskadi» porque «hay aulas suficientes para acoger a todos los estudiantes y no podemos tolerar que se cierre ni una sola aula pública en Euskadi».

Por otro lado, ha indicado que para «blindar la educación pública se puede actuar desde las ideas o desde los intereses» y, en ese sentido, ha criticado que «PNV, PSE y la patronal de la red concertada han optado por los intereses, dando por bueno lo que hasta ahora eran desajustes del sistema, la red dual, la atención al alumnado en función de sus ingresos y, sobre todo, en función de su origen y, en parte, también de su identidad». De esta forma, ha denunciado, «el fallo del sistema se fortalece y la red privada se blinda en detrimento de la escuela pública».

Tras recordar que en Euskadi estamos en una situación demográfica en la que hay menos niños, ha considerado que eso ahora supone «una oportunidad para fortalecer el sistema público educativo y para bajar los ratios de niños por aula».

Desde Sumar, ha explicado, promueven la bajada de los ratios en los centros públicos y una atención «más personalizada al alumnado, especialmente en los entornos rurales, con poca densidad demográfica y donde no cumplir los ratios supone muchas veces el cierre de una escuela».

Esta es la propuesta de Sumar para los próximos cuatro años, «el fortalecimiento y el crecimiento de la escuela pública, que no se cierren aulas públicas y la puesta en marcha de un proceso de publicación acordado y negociado con todos los agentes implicados», ha resumido.

Por otro lado, ha reconocido que la Ley de Educación, «al estar aprobada y en marcha, deja poco margen», pero ha asegurado que seguirán «defendiendo la escuela pública y llevando al Parlamento todas las políticas que estén nuestra mano para defenderla».