La Cámara de Cuentas ultima su informe sobre medidas de apoyo de la Junta a residencias y centros de día en la pandemia

Así lo ha apuntado el recién elegido presidente de la Cámara de Cuentas, Manuel Alejandro Cardenete, en una entrevista concedida a Europa Press en la que ha precisado que dicho informe se encuentra en «fase de alegación», en la que la institución que está siendo fiscalizada y la propia Cámara de Cuentas «interactúan».

De esta manera, ha confirmado que «todavía no hay un borrador definitivo» sobre este informe, y ha trasladado la «intención» de que se «vaya culminando lo más pronto posible».

Cardenete ha apuntado que los tribunales de cuentas están llevando a cabo una «actividad fiscalizadora» sobre cuestiones enmarcadas en los años «duros» de la pandemia de Covid-19, sobre los que, además, la Cámara andaluza ya ha emitido algunos informes, según ha recordado.

Así, ha puesto de relieve que se aprobó un informe de fiscalización sobre ayudas a empresas del sector cultural, que «salió favorable con algún tipo de salvedad», y otro sobre «contratación de personal» del Servicio Andaluz de Salud (SAS) y «una serie de hospitales» que también resultaron «favorables con alguna salvedad».

Además del referido trabajo sobre ayudas a residencias y centros de día, que ya está «terminando» y que espera que se presente «en los próximos meses», la Cámara de Cuentas también tiene ahora «entre manos» un informe sobre «la compra de material» para enfrentar la pandemia, un asunto que «está muy encima de la mesa en los medios» de comunicación actualmente «por lo que ha ocurrido a nivel nacional», según ha reconocido Alejandro Cardenete.

Paralelamente, el Grupo Socialista ha registrado recientemente en el Parlamento andaluz una solicitud de creación de una comisión de investigación sobre las contrataciones mediante la tramitación de emergencia realizadas en el ámbito del sistema sanitario público de Andalucía durante los ejercicios 2020 a 2023 y hasta la fecha.

Preguntado por esta iniciativa, Cardenete ha subrayado que «la Cámara de Cuentas tiene su hoja de ruta y el Parlamento la suya» propia, y el Grupo Socialista «está en su derecho» de pedir una comisión de investigación igual que, a nivel nacional, el Grupo Popular la va a solicitar en el Senado, según ha abundado antes de remarcar que desde la Cámara de Cuentas deben preservar el «carácter independiente» de su trabajo, que derive en la presentación de unos resultados de los que se pueda realizar una «interpretación política» que «no es nuestra responsabilidad», como también «la interpretación judicial escapa a nosotros», ha añadido.

Sobre esa posible interpretación política de los análisis que realice este órgano fiscalizador, sus consejeros «ni debemos ni tenemos que entrar, porque no es nuestro papel», según ha subrayado el presidente de la Cámara de Cuentas, quien ha advertido de que, de lo contrario, «ya seríamos juez y parte», algo que no tendría «ningún sentido» para un órgano que «es de extracción parlamentaria, pero que es autónomo e independiente», ha remarcado.

"no recibo ninguna presión de nadie"

En esa línea, Alejandro Cardenete ha aseverado que él no recibe «ninguna presión de nadie», y se limita a realizar su trabajo junto con los «consejeros y el equipo de auditores». «A partir de ahí, las interpretaciones ya las tendrá que hacer el partido político de turno, la prensa o el ciudadano», ha añadido antes de poner de relieve que este trabajo de la Cámara de Cuentas «se hace para que el ciudadano sepa cómo se está gastando cada euro público que se ha puesto en circulación».

En todo caso, y sobre la base de su experiencia como miembro del Gobierno andaluz de la anterior legislatura --entonces de coalición entre el PP-A y Ciudadanos, en el que fue viceconsejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local desde su conformación en enero de 2019 y hasta su nombramiento, en abril de 2022, como consejero de Educación y Deporte en sustitución del fallecido Javier Imbroda--, Manuel Alejandro Cardenete ha indicado que la contratación que llevó a cabo la Junta en «circunstancias tan especiales» como las de la pandemia contaba con la «luz verde» tanto del Gabinete Jurídico como de la Intervención de la Junta.

«Todo fue muy excepcional, de ahí el carácter de los contratos excepcionales», ha manifestado el exviceconsejero de la Junta, quien ha defendido que la «experiencia» que él tuvo durante su etapa en el Gobierno andaluz es que «todo lo que Gabinete Jurídico e Intervención fue dando como 'luz verde', estaba bajo el amparo de esa protección jurídica y legal».

«A partir de ahí, lo que se pudiera haber hecho, yo ya ni puedo entrar ni es mi campo», pero «mi experiencia ha sido que todo lo que Gabinete Jurídico e Intervención te iba marcando era lo razonable, y a partir de ahí es donde había que moverse, en ese marco», ha abundado el ahora presidente de la Cámara de Cuentas, órgano que está «analizando lo que hemos solicitado a cada una de las consejerías sobre esta materia», según ha confirmado antes de apostillar que, «a partir de ahí, los auditores están haciendo su escrutinio», y el informe correspondiente «se presentará al Parlamento cuando esté terminado», y «a partir de ahí tendrá otro recorrido que yo ahora mismo desconozco», ha puntualizado.

Fiscalización de la gestión de las listas de espera

De igual modo, Cardenete ha confirmado que en el plan de actuaciones de la Cámara de Cuentas para este año 2024 figura el seguimiento de conclusiones y recomendaciones del informe de fiscalización de la gestión de las listas de espera quirúrgica en el sistema sanitario público de Andalucía.

Al respecto, ha valorado que entre las tareas de la Cámara de Cuentas no figura únicamente la emisión de informes para identificar lo que está «regular» o es «mejorable», sino que después también persigue «hacer el seguimiento» para comprobar que lo que se detecta que puede cambiar «se mejora».

Así, ha indicado que, a propuesta de uno de los consejeros, se decidió incluir en el plan de actuaciones para este año 2024 un informe de seguimiento del ya realizado sobre la gestión de las listas de espera quirúrgicas en Andalucía, para comprobar si «se está implementando en positivo» lo recomendado por la Cámara de Cuentas.

No obstante, Cardenete ha precisado que el plan de acción de este año está «empezando» a desarrollarse y «todavía no hay prácticamente nada» realizado, de forma que en estos primeros meses de 2024 «se está recabando la información» solicitada a los órganos correspondientes.

Finalmente, Cardenete ha declinado opinar sobre qué le parece la gestión de las listas de espera que realiza el Gobierno andaluz y su recurso a conciertos con empresas privadas del ámbito de la sanidad, precisamente por su condición de presidente de la Cámara de Cuentas y al tratarse de «un tema absolutamente político» del que debe intentar mantenerse «al margen» de opinar, porque «tengo que ser el garante de que lo que se hace, se hace bien, y no tener una predisposición hacia nada» de lo que se haga, ha argumentado.

«Otra cosa es mi opinión como catedrático de Economía o como ciudadano, pero como presidente de la Cámara de Cuentas tengo que mantenerme al margen y no entrar en ese tipo de debates», porque debe velar por su «independencia» y conseguir, «como he conseguido, que se sienta cómodo tanto un partido como otro del arco parlamentario, con la tranquilidad de que voy a hacer mi trabajo de forma profesional e independiente», ha zanjado Alejandro Cardenete para concluir.