Moreno a la iezquierda del rey Felipe VI en el palco | Joaquin Corchero / AFP7 / Europa Press

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El presidente de la Junta de Andalucía, el popular Juanma Moreno, ha acusado este sábado al presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez, de «imponer un protocolo» para el palco de la final de la Copa del Rey que se celebra este sábado en el estadio de la Cartuja de Sevilla, para que fuese la vicepresidenta primera y Ministra de Hacienda, María Jesús Montero; quien figurase como segunda autoridad del Estado tras Felipe VI, en lugar de hacerlo él.

En una entrevista en Canal Sur Radio, Moreno ha manifestado que le ha «sorprendido» esta situación tras «más de 40 ediciones de la Copa del Rey» con los presidentes autonómicos «siempre como máximos representantes ordinarios del Estado» en tales eventos, merced a lo estipulado por «real decreto», rememorando que en las anteriores finales de la Copa del Rey celebradas en el estadio de la Cartuja ha estado «a la derecha del rey».

A tal efecto, tras asegurar el Gobierno central que la disposición del palco «cumple estrictamente lo que marca la norma y la organiza la Casa Real», Moreno ha manifestado que el presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez, no asiste a esta final de la Copa del Rey al estar haciendo «campaña» electoral en Euskadi pero «impone un protocolo que no va con las normas ni con el estatuto» andaluz de autonomía ni respeta «la proyección de la figura del presidente de la Junta, que representa a todos los andaluces».

Pese a ostentar la Junta de Andalucía el papel de anfitriona y patrocinadora del evento, según ha dicho, la ministra Montero, vicepresidenta primera, ha ocupado el lugar de segunda autoridad del Estado «por delegación» de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, «por la vía de atrás, para que no tenga la presencia que tiene que tener el presidente» de Andalucía, según ha considerado.

Así, ha manifestado que el Gobierno central del PSOE es «el único responsable» de esta situación, que espera que «sólo sea una anécdota», solicitando que «se tenga en cuenta a futuro y que el Gobierno recapacite y respete las instituciones de Andalucía».