Así consta en un auto consultado por Europa Press este viernes, en el que el Juzgado de Instrucción 3 de Reus (Tarragona) ha decidido dejar en libertad provisional con medidas cautelares a 16 de los 32 detenidos el miércoles durante un operativo para desarticular el grupo juvenil de los 'Latin Kings', llamado 'Reino', y llaman a su sección en Catalunya 'Reino Hispano'.
En agosto de 2022, los investigadores empezaron a seguir a la rama asentada en Reus, y a partir de ahí encontraron otros grupos en Rubí, Cubelles, Barcelona, L'Hospitalet de Llobregat y Granollers (Barcelona), que presuntamente se financian con el tráfico de drogas, las estafas y una cuota obligatoria para todos los miembros, y también se les atribuyen delitos contra las personas como lesiones, amenazas, coacciones y homicidios.
Entre los arrestados que este viernes han salido en libertad provisional están los dos líderes de la organización en Catalunya, con un rango al que denominan 'Suprema', y son un 'king' (hombre miembro de pleno derecho) y una 'queen' (mujer miembro de pleno derecho), mientras que también están investigados miembros con un rango inferior, a los que llaman 'fase' o miembro 'no coronado'.
Para estar en libertad provisional mientras se investiga el caso, el juez les ha prohibido salir de España, les ha retirado el pasaporte y les ha ordenado comparecer cada mes en el juzgado, y también se les investiga por un presunto delito de pertenencia a organización criminal.
A raíz de lo investigado hasta ahora, el juez destaca la «especial peligrosidad» del grupo Sagrada Familia (con miembros de Barcelona y L'Hospitalet de Llobregat), que presuntamente planificó un ajuste de cuentas contra miembros de una banda rival como venganza por el apuñalamiento de unos sus miembros, en el que pensaban usar armas pero no llegaron a hacerlo.
Obedecer "ciegamente"
El juez constata que los 'Latin Kings' tienen una normas y códigos internos que «deben ser conocidas y obedecidas ciegamente» por todos sus miembros, y de lo contrario son sancionados con castigos físicos como agresiones, golpes o humillaciones, como obligar a alguien a hacer flexiones ante el resto del grupo hasta acabar exhausto.
«En todos los casos la finalidad es que el sancionado tenga presente la organización de los 'Latin Kings' y sus normas y disciplina, buscar con ello el escarmiento y la cohesión grupal bajo la conminación a sufrir una agresión mayor, y en el último caso para dejar una marca visible y permanente» de su falta hacia las normas del grupo.
Describe en la organización un fuerte código interno y «un gran nivel de disciplina con el fin de mantener la cohesión interna y el sometimiento de sus miembro», para lo que usan castigos físicos y presión inculcando a todos los miembros que los intereses del grupo están por encima de los individuales.
El juez también señala la obligatoriedad de pertencer al grupo, «ya una vez se ingresa en el mismo es muy difícil abandonarlo, y en ese caso en base al código interno de la banda se debería de sufrir un castigo físico».
Estudiar "rezos, filosofía y actividades"
Además de las normas internas, el grupo cuenta con su 'Literatura', que son «textos de enseñanzas de los rezos, filosofía y actividades de los 'Latin Kings'», que deben estudiarse, aprenderse y a menudo demostrar ante los demás que se las saben bajo amenaza de ser castigados.
Durante el registro en casa de un detenido el miércoles en Granollers, los agentes encontraron un documento que forma parte de esta 'Literatura', y en un fragmento dice: «Yo entiendo que cualquier orden dada a mí por alguno de mis superiores debe seguirla sin excusas y como sea. Yo también moriré por mis hermanos y hermanas si es necesario».
El juez señala que otros extractos que forman parte del reglamento interno de la banda suponen odio o discriminación, como este: «Son prohibidas las actividades homosexuales, bisexuales, transexuales. Cualquier miembro que participe en actividades homosexuales será suspendido de la nación y puesto a investigación».
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