Los ginecólogos en un quirófano del hospital zaragozano, Clínico Universitario, donde se administran estos tratamientos. | GOBIERNO DE ARAGÓN

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El Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza ha llevado a cabo los primeros casos en un centro público aragonés de ablación térmica volumétrica por radiofrecuencia para el tratamiento del mioma uterino.

Se trata de un tumor benigno de tejido muscular de la pared del útero, que tiene una naturaleza de respuesta hormonal. De ahí que afecte principalmente a las mujeres durante sus años reproductivos, han precisado desde el Departamento de Sanidad.

La nueva técnica implementada es mínimamente invasiva y ofrece importantes beneficios para las pacientes que, cumpliendo unas determinadas condiciones médicas, desean preservar su útero. Esto es posible, fundamentalmente, a que la ablación se aplica directamente sobre el tumor, sin dañar el tejido adyacente, y no conlleva cicatrices que debiliten la pared uterina, ya que no implica abrir la cavidad.

Además, es un procedimiento ambulatorio y rápido, sin apenas pérdida de sangre y con bajas tasas de recurrencia. Los especialistas en Ginecología serán quienes determinen las mujeres a las que se les puede aplicar el procedimiento en base a la historia clínica, síntomas y resultados de las exploraciones de imagen.

Tratamientos

Existen muchas opciones de tratamiento para el mioma uterino sintomático, que incluyen terapias farmacológicas, terapias mínimamente invasivas y terapias quirúrgicas. Su elección es individualizada y puede incluir una combinación de varias alternativas.

El nuevo tratamiento, gracias a la radiofrecuencia, supone una alternativa a otras cirugías. Consiste en la aplicación de una corriente eléctrica de alta frecuencia que genera un calor por encima de los 65ºC en el interior del mioma y la consecuente necrosis o destrucción irreversible del tejido miomatos, ha explicado el jefe de servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Clínico de Zaragoza, el doctor Miguel Díaz.

La técnica se realiza bajo sedación, en un intervalo entre 10-30 minutos, dependiendo del volumen a tratar. La vía de acceso es a través del fondo vaginal posterior, anterior o transcervical.

Este procedimiento se ha incluido en la cartera de servicios de Aragón recientemente y se va a ir extendiendo a otros centros de la comunidad autónoma progresivamente.