Archivo - Zaragoza.- El PSOE urge a Chueca un nuevo Plan de Seguridad vial con cargo al presupuesto de 2024 | PSOE - Archivo

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La concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza Ros Cihuelo ha lamentado este jueves la «nula autocrítica» del Gobierno de Natalia Chueca a pesar de haber aumentado los accidentes de tráfico en el casco urbano de Zaragoza, con casi 3.000 el año pasado, en los cuales hubo 10 fallecidos, cifra que iguala la de 2022.

Cihuelo ha puesto sobre la mesa esas «dramáticas» cifras en una comparecencia del PSOE en la Comisión de Presidencia: «Para el PP, parece que somos los socialistas los que tenemos la culpa de hacer oposición y pedir explicaciones ante el incremento de accidentes graves registrados en las vías de nuestra ciudad, acusándonos de demagogos y alarmistas; pero también parece que la culpa es, según han dicho, que el parque móvil de Zaragoza cuenta con muchos vehículos privados de más de 12 años», ha explicado.

La portavoz socialista ha lamentado que, en todo caso, que Zaragoza «haya dejado de ser una ciudad que en tiempos fue ejemplo de seguridad vial y pese a ello, seguimos sin tener un Plan de Seguridad Vial, que ya fue anunciado la pasada legislatura. Un Plan que sigue, además, sin haber incorporado a los grupos políticos», ha criticado.

Los datos de accidentes, ha explicado el grupo socialista, se desprenden de la última memoria de la Policía Local de Zaragoza, donde se constata, además del aumento de la gravedad de los accidentes en las calles de nuestra ciudad, que las principales víctimas mortales siguen siendo los peatones, y además, los más vulnerables, ya que todos superaban los 65 años de edad. Se constata, además, que el 65% tenía prioridad.

«Llevamos ya mucho tiempo hablando del aumento de siniestros y de accidentes en nuestra ciudad. El PP dijo que mientras se elaboraba el Plan de Seguridad Vial se iban a tomar medidas, de forma transitoria, para reducir el número de accidentes, algo que lamentablemente no ha ocurrido», ha subrayado.

La concejal socialista ha recordado que el pasado 25 de febrero, con el comienzo de los procesos participativos, el Gobierno de Chueca admitió un grave problema con los atropellos y llegaron a decir que la cifra de fallecidos «empezaba a ser alarmante». «¿De verdad comienza a ser alarmante? No solo hay que preocuparse, sino ocuparse. Llevamos ya mucho tiempo con unas cifras de siniestralidad descorazonadoras y, lejos de solucionar este grave problema, echan la culpa a todos los demás», ha criticado.

Cihuelo ha considerado que una ciudad como Zaragoza no se puede permitir los datos que muestran la memoria de la Policía Local, con un incremento de los siniestros que sigue desde 2019 cada vez a más y que ha vuelto a aumentar en el último año. Pero, además, 140 accidentes graves frente a las 115 de 2022. «En cada uno de los accidentes graves hay muchas personas detrás», ha lamentado.

La concejal socialista también ha achacado este incremento a «un componente ideológico». «No es casualidad lo que está pasando en la Ordenanza de Movilidad, que también afecta a la seguridad, para que en determinadas vías haya más velocidad para los coches. El PP, con sus gemelos de VOX, les ha vuelto a dar protagonismo a los coches, siendo los mayores causantes en siniestros y fallecidos», ha explicado.

Además, Cihuelo ha recordado que la memoria de la Policía Local también habla de los 174 siniestros en los que se vieron involucrados autobuses urbanos. "¿Esto tendría algo que ver con la reordenación de las líneas de autobuses y el nivel de estrés de los conductores para cumplir los tiempos establecidos? ¿O incluso con un problema de reorganización en la convivencia de cómo moverse y desplazarse en la ciudad de Zaragoza?, se ha preguntado.

La concejal socialista ha señalado que, por mucho que lo niegue VOX, «no es lo mismo que te atropellen a más de 30 kilómetros hora porque el resultado puede ser muy grave, y eso lo han dicho los técnicos municipales».

Además, ha lamentado que «quieren inocular la idea de que cada uno pueda hacer lo que le dé la gana y que cualquier norma de convivencia pensando en el interés general es una restricción intolerable de la libertad, palabra de la que se han apropiado sin tener ni idea de que la libertad habla de respeto y de convivir con los demás», ha concluido.