Estos son los datos desglosados por la consejera de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, Patricia del Pozo, en el pleno del Parlamento a preguntas del PP sobre los resultados de las pruebas de las evaluaciones de diagnóstico, establecidas por la Ley Orgánica de Educación en todas las comunidades autónomas, que «tienen como objetivo comprobar el dominio de las competencias del alumnado en comunicación lingüística (Lengua Castellana y Literatura y primera Lengua Extranjera) y Matemáticas».
En su intervención, la consejera ha destacado que el alumnado andaluz ha mostrado un «buen nivel» en competencia lingüística, tanto en Lengua Castellana y Literatura como en Lengua Extranjera (inglés, francés o alemán) mientras que en Matemáticas «se constata el amplio margen de mejora que hay en esta materia». Así, los estudiantes han obtenido de media de todas las competencias evaluadas entre un seis y un siete dependiendo de la etapa, es decir 6,72 el alumnado de cuarto de Primaria y 6,06 el de segundo de la ESO.
Por competencias, tanto en Primaria como en Secundaria, la consejera ha señalado que el alumnado andaluz ha alcanzado en Lengua Castellana y Literatura la calificación de notable, superando el siete, en concreto 7,10 en Primaria y 7,02 en Secundaria. Así, los estudiantes de Primaria presentan «un buen nivel» a la hora de buscar información y contrastarla (8,04); en la utilización del lenguaje de manera respetuosa (7,92) o en el momento de leer, interpretar y analizar textos literarios (7,47).
En el caso de Secundaria se les ha evaluado con un 7,42 la destreza de la producción de textos escritos y con un 7,29 el uso de terminología adecuada. Respecto a la evaluación de la Lengua Extranjera (inglés, francés o alemán) el nivel es «medio-alto», con notas en torno al 6,5 en ambas etapas. Los resultados, ha indicado la titular de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, muestran un resultado «ligeramente superior» en los escolares que estudian inglés y francés frente a los que cursan alemán.
En cuanto a las Matemáticas, Del Pozo ha informado de que estas pruebas han detectado «el amplio margen de mejora que hay en esta materia». En todo caso, en Primaria, el alumnado ha logrado una calificación media de 6,51 puntos. Destacan a la hora de representar conceptos y resultados matemáticos utilizando el lenguaje propio de esta materia (6,83), interpretando situaciones de la vida cotidiana de manera matemática (6,67).
En cambio, ha explicado la consejera, se ha detectado que el alumnado de cuarto de Primaria «debe mejorar» la capacidad de plantear problemas (6,31) y de relacionar ideas matemáticas (6,27). En la evaluación del alumnado de segundo de la ESO en esta materia los resultados han descendido algo menos de dos puntos con respecto a Primaria, causada principalmente por «una menor habilidad del estudiante tanto para plantear problemas como, sobre todo, para usar el pensamiento computacional y organizar los datos».
La media alcanzada ha sido de 4,62 puntos, aunque en interpretar situaciones cotidianas y en comunicar procedimientos y resultados matemáticos han alcanzado «casi un cinco». Una vez detallado los datos, la consejera ha afirmado que el balance que se ha hecho de los resultados obtenidos «es positivo porque nos ayudan a saber dónde debemos poner el foco y nos refuerzan en las decisiones que hemos puesto en marcha, como ser una de las comunidades autónomas con mayor carga horaria en Matemáticas y Lengua o la lectura planificada un tiempo no inferior a 30 minutos diarios, tal y como recoge el nuevo currículo de Educación Primaria y Secundaria Obligatoria que se ha estrenado este curso».
Del Pozo también se ha referido a las instrucciones publicadas recientemente con iniciativas para fomentar el razonamiento matemático a través del planteamiento y resolución de retos y problemas en Infantil, Primaria y Educación Secundaria Obligatoria (ESO). En relación con el refuerzo de las Matemáticas, la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional ha publicado unas instrucciones con las medidas para fomentar el razonamiento matemático a través del planteamiento y resolución de retos y problemas en Infantil, Primaria y Educación Secundaria Obligatoria (ESO). En dichas instrucciones, se fija, entre otras medidas, que en Primaria y ESO «cada semana se establecerá un tiempo definido en el horario» para «sistematizar la resolución de retos y problemas».
Ese tiempo «deberá distribuirse en tres días distintos con una duración de, al menos, 30 minutos cada uno». Así aparece recogido en el documento consultado por Europa Press. Se trata de una medida que forma parte de la estrategia de la Consejería para mejorar los resultados académicos en Matemáticas y que incluye también un aumento de la carga lectiva de esta materia en el currículum andaluz, que ha entrado en vigor en este curso.
En el segundo ciclo de Educación Infantil, «la dedicación a la resolución de retos y problemas se hará de forma integrada en el desarrollo de las diferentes áreas o ámbitos de experiencia». Dicho tiempo «se dedicará a la resolución de una o varias situaciones problemáticas en las que se siga la secuencia establecida para la interpretación del problema y análisis de las preguntas planteadas, aplicación de estrategias de análisis y resolución, comunicación y discusión de los resultados, poniendo el foco de esta forma en los procesos de razonamiento y resolución creatva de problemas».
La Consejería que dirige Patricia del Pozo argumenta en las instrucciones que la resolución de problemas «debe contribuir a fomentar en el alumnado una actitud positiva hacia las Matemáticas. Ésta se logra cuando el alumnado se siente capacitado para la aplicación de procesos de razonamiento lógico y resolución de problemas, lo que se logra dedicando tiempo y esfuerzo pero también en ambientes que propicien la seguridad necesaria para afrontar estos aprendizajes».
En las orientaciones didácticas y metodológicas generales, la Junta defiende que es «imprescindible dedicar el tiempo que sea necesario para leer adecuadamente los enunciados con un ritmo y una entonación facilitadora, aclarando conceptos, nuevos léxicos, utilizando sinónimos, fragmentando las partes del enunciado, diferenciando las preguntas del mismo y sustituyéndolas por otras si fuera necesario para saber identificar y diferenciar la información relevante y qué operaciones son necesarias realizar».
Por ello, Desarrollo Educativo propone utilizar «una plantilla adaptada a la estructura de cada tipo de problema y al nivel educativo del alumnado, donde se volcará la información extraída del enunciado: preguntas por orden cronológico, datos organizados, claves semánticas que faciliten la identificación de las operaciones necesarias a realizar y en qué orden, comprobación de la lógica y coherencia del resultado y explicación del mismo». Es «conveniente», entiende la Junta, usar textos matemáticos «de distinta naturaleza», como tablas de datos, gráficas, etiquetas, tickets de compra, presupuestos, facturas, recetas de cocina, croquis, mapas y escalas, entre otras herramientas.
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