La detención se produjo el pasado 22 de julio, después de que la investigación iniciara a finales de diciembre de 2023, según ha informado este sábado la policía catalana en un comunicado.
Los detenidos presuntamente mostraban los productos robados en dicho establecimiento y negociaban una remuneración en efectivo, entre los que se encontraban teléfonos móviles, ordenadores portátiles, cámaras fotográficas, tabletas portátiles, joyas de oro y documentación, entre otros.
El pasado 22 de julio se llevó a cabo el cacheo de tres domicilios, donde se encontraron más de 120 dispositivos electrónicos, teléfonos, tarjetas de crédito, joyas y decenas de documentos de identidad, además de 20.000 euros en efectivo.
Los arrestados, que acumulan 33 antecedentes por delitos similares como receptación, robos violentos, hurtos o pertenencia a organizaciones criminales, pasaron el pasado 23 de julio a disposición del juzgado de guardia de Barcelona.
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